martes, 13 de enero de 2015

Y el día cinco Daniel se nos puso malito

Como era de prever el día de las noche más mágica, Daniel amaneció con fiebre, temblores y muy mal cuerpo. Por mucho que me suplicaron él y su padre, me negué en redondo a que saliera a la calle a ver la cabalgata. En solidaridad, su hermano pequeño, que no se estaba enterando mucho del tema también se quedó en casa, aunque no pareció sentirlo en absoluto.

El día mejoró porque el tío Fernando y la Prima Natalia vinieron a pasar el día, lo que le distrajo mucho. Y también debía estar algo tocada porque me tuve que acostar un par de horitas para ser persona. Momento que aprovecharon para tirarse a la calle, enfermito incluído. Todos aseguraron que se sentía mucho mejor, gracias al Dalsy añadiría yo. Aún así, la cabalgata, que pasaba cerca de la casa de mi madre ya bien entrada la noche, sólo la vio por la tele.

El papá los entretuvo mucho jugando a un clásido: el juego de las chapas. pegaron pegatinas de superhéroes y se montaron un gran batalla en una mesita.

Cuando nos fuimos a dormir, volvía a estar hecho una pena el pobre, aunque con mucha ilusión por la venida de los Reyes en Canarias. Se perdió la emocionante tarea de poner la comida para los Reyes, que ejecutó el más pequeños de la familia con alegría. Le habíamos dicho a Daniel que no podríamos seguir el plan de ir a la casa de la tía Silvia a por lo que le echaran allí (con la idea de ver al tío Jose de "la pata chafada"), porque estaba malito, pero que no se preocupara que papá e Iván le traerían su regalito.

El peque lo entendió un poco mal y al día siguiente se levantó el primero, cogió la tablet y se sentó a jugar un rato impasible. "¿Pero no buscas los regalos?" Le preguntó su padre asombrado. "Papaaaaa, que los regalos los han  traído en la casa de la tía Siiiiilvia" le aclaró muy seguro. Estallamos en carcajadas y le señalamos una mesa llena de paquetes que le hizo esbozar una gran sonrisa de ilusión.

A los pocos minutos, entraban mi hermano y su familia por la puerta, levantábamos a Iván y abríamos el primero de los paquetes: unos camiones geniales y coches para cada uno. Mi hermana llegó al poco con más paquetes porque el tío Jose había pasado mala noche y lo mejor era dejarlo en la tranquilidad del hogar y no armar mucho barullo a su alrededor.

Los peques abrieron sus regalos muy ilusionados: coches teledirigidos, Invizimals, paneles motivadores con caramelos imanes... Todo les hizo mucha ilusión.

Enseguida se pusieron a jugar entusiasmados.




10 comentarios:

  1. Todavía me acuerdo de la ilusión con la que me levantaba la mañana de Reyes. Creo que Navidad y Reyes eran los únicos días en que madrugaba con gusto. Jajajaja. Besotes!!!!!

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    1. Yo también. Y casi ni dormía por la emoción jajaja

      Qué recuerdos!!

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  2. Aix... es que mola tanto ver su carita de ilusión! Así las enfermedades pasan mucho mejor. ;)
    Muas!

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    1. Que razón tienes porque el día siete ya estaba casi como nuevo jajaja

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  3. Pobrecito, pero que bien la solidaridad del hermano y que al final os reunierais toda la familia para disfrutar del día de reyes. Seguro que aunque no pudo ver la cabalgata fue muy feliz. Un besazo.

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    1. La verdad es que mis hermanos se vuelcan en los chiquillos cada vez que vamos. No me extrañan que sean sus tíos favoritos jajaja

      Sí que mimamos a Daniel ese día :D

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  4. ¡Cuántos regalos!!! Pero una pena lo de Daniel :( un beso fuerte desde aquí, y q se recupere pronto!!! ¡muac!

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    1. Al peque le duró la fiebre dos días y luego no había quien lo retuviera en casa jajaja

      Estos chiquillos son muy duros ;)

      Muchas gracias!!

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  5. Hola: no sé lo que tiene el Dalsy pero cuando mis hijas están algo malas y lo toman al cabo de media hora ya están dando saltos y piruetas... es milagroso... Me alegra leer que la mañana de Reyes fue entrañable y que todos amanecisteis con la ilusión de la llegadas de los tres Magos... ya veo que acertaron plenamente con todos los regalos. Seguimos en contacto

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    1. Es milagroso!! Jajaja

      Y hay que ver cómo les pone las pilas.

      Estar con la familia, sobre todo cuando la tienes lejos, es el mejor regalo para mí :D

      Muchas gracias!!!

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