Este verano nos sumamos a los Deberes de Vida del Profe Manolo. ¿Y quién no lo haría? da igual la edad que tengas porque las actividades que propone te van a molar y mucho. Cómo el mismo autor comenta en la introducción, este cuadernillo es para hacerlo como quieras, con quien quieras y cuando quieras.
Es altamente flexible. Que te parece una actividad muy fácil... ¡pues profundiza, investiga, complícala todo lo que quieras! Que la ves demasiado difícil, ¡pide ayuda! ¡Comparte la experiencia con tus padres, abuelos, hermanos mayores, primos...! Que te da perezón, pues pasa a otra que te motive. Lo importante es pasarlo bien, porque lo de aprender ya viene de serie.
Eso sí, te aconseja que primero te mires bien a fondo el libro y luego elijas lo que te apetezca hacer en el orden que prefieras, porque algunas actividades requieren de un entorno concreto, como las que se refieren a la naturaleza, o de una planificación posterior. Por lo demás... ancha es Castilla.
Me encantan los cimientos en los que se basa este profesor para construir las actividades: nadie nace enseñado y de los errores se aprende; repite, repite y repite hasta que te salga bien, déjate guiar por la curiosidad, crea tu propio criterio, investiga, contrasta, cuestiónalo todo...
Lo mejor de todo es que te invita a ir dejando recuerdos de tus actividades en el libro para guardarlo como una especie de álbum del verano. Algunas actividades se hacen directamente en el cuaderno de actividades, aunque se pueden exportar y realizar en un cuaderno aparte todas las veces que quieras.
Todo comienza con una lista de actividades y una casilla para ir marcando según las vayas haciendo. Es el índice que lo que te vas a encontrar dentro. Los contenidos giran alrededor de una actividad, pero cada página tiene muchísima chicha: indicaciones, consejos, perlas de sabiduría, actividades complementarias, juegos, cuentos...
Por ejemplo, una de las actividades recomienda leer un par de libros o cómics y como actividad complementaria hacer un lectómetro muy visual en el que pondremos el título y una carita expresando lo que nos ha parecido. ¡Me encanta! Mis hijos se agobian muchísimo con las fichas de los libros.
Piensan que ya con leer, ya hacen demasiado, así que me parece genial que expresen de una forma tan simpática y sencilla lo que les ha parecido y encima se piquen para leer más y tener más marcas en su lectómetro. Para comprobar la comprensión lectora sólo tenemos que charlar con ellos sobre la lectura, a mis hijos les estimula mucho más que enfrentarse a las fichas resumen.
Para la escritura hay otras muchas actividades en este libro que seguro que les motiva más, como hacer un cómic, una entrevista, un cuento...
También hay muchísimas actividades de investigación, prestar atención, experimentación, gestión de las emociones, conocerse a si mismo, autoestima, relaciones sociales, comunicación, medio ambiente, responsabilidad, higiene, alimentación sana... completísimo. ¡Lo vamos a pasar bomba!
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viernes, 28 de junio de 2019
miércoles, 26 de junio de 2019
Strad el violinista rebelde en el Show Festival de La Vaguada
El sábado culminamos el día de los planazos con el Show Festival de Verano que se organiza en La Vaguada de jueves a sábado. Nos fuimos al concierto de Strad el violinista rebelde. No lo conocíamos de antes, pero nos ha encantado.
Quedamos con un amiguito de Daniel un buen rato antes para que jugaran un rato en el parque mientras los adultos nos tomábamos algo en la terracita. Fue una jornada muy agradable. Así estuvimos hasta que se hizo la hora del concierto.
Entonces nos sentamos cerca para disfrutarlo. Puede que demasiado cerca, porque para el amigo de Daniel el sonido estaba demasiado alto (bueno, y para todos, pero es que cuando dan caña mola más así) y acabó por irse.
Iván, acelerado por la jornada de parque también cedió su asiento a otro amante de la música y se fue al parque infantil de al lado a hacer el cabra. Pero Daniel se quedó clavado a su asiento a mi lado. "A mí me encanta, mamá", em dijo, "No quiero irme". ¡Toma! Ni yo. El espectáculo valía la pena y mucho.
Mezclaron canciones muy conocidas de AC/DC, Michael Jackson, Extremoduro, Gloria Gaynor, Nirvana, Lindsey Stirling... con suyas propias y nos hicieron vibrar con su música, tanto, Jorge, el violinista, como el resto de la banda que se dejó la piel tocando a todo meter.
El de la batería hizo un solo espectacular que luego hizo que al terminar la actuación mis hijos lo buscaran para hacerse una foto con él. Y con el violinista también quisieron foto, por supuesto, que sudó la camiseta haciendo todo tipo de cabriolas y virguerçias, bajando y subiendo del escenario y recorriendo la terraza de uno a otro confín, como se suele decir, para mezclarse con el público y animarnos a todos a aplaudir, pegar botes y casi bailar en nuestros asientos.
Bueno, si hubiera sido por ellos con todos, pero nos teníamos que ir, que se nos hacía tarde.
Entre canción y canción, el violinista nos narraba retazos de su vida convertidos en divertidos monólogos de humor, aunque algunas cosas que contaba eran algo extremas y Daniel y yo coincidimos en que no sabíamos si creerlas o no. Sobre todo el tema de tirarle las llaves del coche a su madre por el hueco del ascensor cuando era pequeño siempre que tenía ocasión. "¿Y cuantas llaves del coche tenía su madre?", me preguntaba el peque impresionado, "Y luego ¿Cómo conseguía llaves nuevas?". Eso le dejó impactado jajaja
Por cierto, le he amenazado sin videojuegos hasta el fin de los tiempos como intente emular al músico en sus gamberradas infantiles.
Nos reímos, aplaudimos, botamos en las sillas... sobre todo yo, e Iván cuando por fin hizo acto de presencia, porque se sentó en mis piernas y botada conmigo al ritmo de la música muerto de la risa. Cuando se despidieron el público pidió bises entusiasmados y ellos nos complacieron una par de veces antes de dar por finalizado de verdad. Una pena, con lo animados que estábamos...
Aquí os dejo la programación del Show Festival de La Vaguada de Julio.
Quedamos con un amiguito de Daniel un buen rato antes para que jugaran un rato en el parque mientras los adultos nos tomábamos algo en la terracita. Fue una jornada muy agradable. Así estuvimos hasta que se hizo la hora del concierto.
Entonces nos sentamos cerca para disfrutarlo. Puede que demasiado cerca, porque para el amigo de Daniel el sonido estaba demasiado alto (bueno, y para todos, pero es que cuando dan caña mola más así) y acabó por irse.
Iván, acelerado por la jornada de parque también cedió su asiento a otro amante de la música y se fue al parque infantil de al lado a hacer el cabra. Pero Daniel se quedó clavado a su asiento a mi lado. "A mí me encanta, mamá", em dijo, "No quiero irme". ¡Toma! Ni yo. El espectáculo valía la pena y mucho.
Mezclaron canciones muy conocidas de AC/DC, Michael Jackson, Extremoduro, Gloria Gaynor, Nirvana, Lindsey Stirling... con suyas propias y nos hicieron vibrar con su música, tanto, Jorge, el violinista, como el resto de la banda que se dejó la piel tocando a todo meter.
El de la batería hizo un solo espectacular que luego hizo que al terminar la actuación mis hijos lo buscaran para hacerse una foto con él. Y con el violinista también quisieron foto, por supuesto, que sudó la camiseta haciendo todo tipo de cabriolas y virguerçias, bajando y subiendo del escenario y recorriendo la terraza de uno a otro confín, como se suele decir, para mezclarse con el público y animarnos a todos a aplaudir, pegar botes y casi bailar en nuestros asientos.
Bueno, si hubiera sido por ellos con todos, pero nos teníamos que ir, que se nos hacía tarde.
Entre canción y canción, el violinista nos narraba retazos de su vida convertidos en divertidos monólogos de humor, aunque algunas cosas que contaba eran algo extremas y Daniel y yo coincidimos en que no sabíamos si creerlas o no. Sobre todo el tema de tirarle las llaves del coche a su madre por el hueco del ascensor cuando era pequeño siempre que tenía ocasión. "¿Y cuantas llaves del coche tenía su madre?", me preguntaba el peque impresionado, "Y luego ¿Cómo conseguía llaves nuevas?". Eso le dejó impactado jajaja
Por cierto, le he amenazado sin videojuegos hasta el fin de los tiempos como intente emular al músico en sus gamberradas infantiles.
Nos reímos, aplaudimos, botamos en las sillas... sobre todo yo, e Iván cuando por fin hizo acto de presencia, porque se sentó en mis piernas y botada conmigo al ritmo de la música muerto de la risa. Cuando se despidieron el público pidió bises entusiasmados y ellos nos complacieron una par de veces antes de dar por finalizado de verdad. Una pena, con lo animados que estábamos...
Aquí os dejo la programación del Show Festival de La Vaguada de Julio.
martes, 25 de junio de 2019
El mercadillo solidario de Indonesia
Todos los años, a finales de junio, tiene lugar el mercadillo solidario de Indonesia en los jardines de la embajada de este bonito país. Se montan puestos emulando los que se pueden encontrar allí de comida callejera o en los zocos de artesanía y se deleita a los presentes con todo tipo de espectáculos de danza, canto o artes marciales.
A mis niños les encanta asistir para ponerse las botas con las delicatessens indonesias. ¡Quieren probarlo todo! Y siempre repiten de una chuche gelatinosa de colores que les flipa.
Nada más llegar cambiamos dinero por los tickets para comprar en el mercadillo e hicimos una primera elección para ir abriendo boca: unos rollitos de pollo y verduras varias. Muy ricos.
Buscamos un sitio estratégico en el césped porque las mesas ya estaban pilladas y, al final, nos salió muy bien la jugada porque veíamos genial el escenario.
Por él desfilaban bailarines, cantantes, músicos... Todos con vistosos atuendos y tocados. Precioso de ver.
Mientras nosotros comíamos arroz, tallarines, empanadillas, curiosos zumos... todo delicioso y diferente a lo que estamos acostumbrados. ¡Hasta probé un poco de pulmón de vaca! Y estaba bastante bueno.
Nos quedamos a ver cómo tocaban un gran instrumento tradicional de Indonesia para el que se necesitan muchos músicos y luego nos fuimos a casa. Fue una velada muy divertida y exótica.
A mis niños les encanta asistir para ponerse las botas con las delicatessens indonesias. ¡Quieren probarlo todo! Y siempre repiten de una chuche gelatinosa de colores que les flipa.
Nada más llegar cambiamos dinero por los tickets para comprar en el mercadillo e hicimos una primera elección para ir abriendo boca: unos rollitos de pollo y verduras varias. Muy ricos.
Buscamos un sitio estratégico en el césped porque las mesas ya estaban pilladas y, al final, nos salió muy bien la jugada porque veíamos genial el escenario.
Por él desfilaban bailarines, cantantes, músicos... Todos con vistosos atuendos y tocados. Precioso de ver.
Mientras nosotros comíamos arroz, tallarines, empanadillas, curiosos zumos... todo delicioso y diferente a lo que estamos acostumbrados. ¡Hasta probé un poco de pulmón de vaca! Y estaba bastante bueno.
Nos quedamos a ver cómo tocaban un gran instrumento tradicional de Indonesia para el que se necesitan muchos músicos y luego nos fuimos a casa. Fue una velada muy divertida y exótica.
lunes, 24 de junio de 2019
Último cuento de la temporada de cuentacuentos Dragonball de Akira cómics e historias chinas
Este sábado tuvo lugar el último cuentacuentos de la temporada de Dragon Ball en Akira Cómics, que pena... Pero la buena noticia es que a principios de curso volverán con nuevas historias y se comenta que puede que esta vez la cosa vaya de super héroes, de ficción y de la vida real. ¡Suena genial!
Pero centrémonos en esta última sesión en la que Goku y sus amigos serán los protagonistas. En esta ocasión, la cuentacuentos nos narró dos grandes batallas en las que se destruyó el mundo, murieron muchos personajes, revivieron algunos... Pero el caso es que Goku nos salvó al final como siempre. Él es así de confiable.
Después nos contó un montón de cositas curiosas sobre China, el país del que que provenían todos los cuentos que vendrían a continuación. ellos inventaron el papel, la pólvora, la acupuntura, siguen una costumbres higiénicas que no compartimos en absoluto, están educados en la cultura del esfuerzo y en el trabajo en equipo, son capaces de copiar cualquier cosa y tienen una cocina muy diferente a la nuestra, entre otras muchas más cosas.
¡Ah! y que es un país increíble para visitar y conocer en unas vacaciones: la muralla china, la ciudad prohibida, los guerreros de Xian, los mil budas...
Para el primer cuento que contó necesitó dos voluntarios y enseñaba que si una información no pasaba por la verja de la verdad, de la bondad y de la necesidad no valía la pena difundirla. Es decir, que si no sabemos que el chisme sea verdad, sea algo bueno o sea una información necesaria, mejor olvidarla y seguir con nuestra vida.
Te partías con los voluntarios: uno actuaba tímidamente y el otro con muchísimo entusiasmo. Fue divertidísimo.
La leyenda que vino después contaba como surgieron los cuatro ríos más importantes de China, que en su origen fueron cuatro dragones de diferentes colores que se empeñaron en salvar a la humanidad de una tremenda sequía en contra de la desidia de un importante dios. Finalmente se convirtieron en los ríos para dar agua dulce al pueblo chino. Muy bonita.
Le siguió un cuento corto, también muy gracioso sobre un marido despistado, una mujer celosa y un espejo que parecía cosa de magia.
El siguiente trataba del enamoramiento de la hija pequeña de un dios con un mortal y de cómo su madre quiso separarles a cualquier precio. Pero fue tan fuerte su amor que se les permitió verse una vez al año, que es el día de los enamorados en china.
Para el cuento final necesitó siete voluntarios que sujetaron las letras de una palabra muy importante, importantísima. Mientras explicaba por qué era tan importante, los peques iban descubriendo su letra con mayor o menor habilidad, haciendo que el público se carcajeara. La palabra es: Gracias. No podía ser otra.
Al final nos quedamos un ratito para ver la exposición de los dibujos que habían ido entregando los niños a la cuentacuentos. ¡¡Todos chulísimos!! Mis niños no hicieron ninguno porque son unos sosos para estas cosas. Que pena.
Gracias Akira Cómics por estos cuentacuentos tan divertidos organizados por Iván Marugán y Carmen Huertas. Gracias sobre todo a ésta última, la cuentacuentos, que se esforzó al máximo, a pesar de tener la garganta tocada, para que pudiéramos disfrutar a tope de este último cuentacuentos.
Pero centrémonos en esta última sesión en la que Goku y sus amigos serán los protagonistas. En esta ocasión, la cuentacuentos nos narró dos grandes batallas en las que se destruyó el mundo, murieron muchos personajes, revivieron algunos... Pero el caso es que Goku nos salvó al final como siempre. Él es así de confiable.
Después nos contó un montón de cositas curiosas sobre China, el país del que que provenían todos los cuentos que vendrían a continuación. ellos inventaron el papel, la pólvora, la acupuntura, siguen una costumbres higiénicas que no compartimos en absoluto, están educados en la cultura del esfuerzo y en el trabajo en equipo, son capaces de copiar cualquier cosa y tienen una cocina muy diferente a la nuestra, entre otras muchas más cosas.
¡Ah! y que es un país increíble para visitar y conocer en unas vacaciones: la muralla china, la ciudad prohibida, los guerreros de Xian, los mil budas...
Para el primer cuento que contó necesitó dos voluntarios y enseñaba que si una información no pasaba por la verja de la verdad, de la bondad y de la necesidad no valía la pena difundirla. Es decir, que si no sabemos que el chisme sea verdad, sea algo bueno o sea una información necesaria, mejor olvidarla y seguir con nuestra vida.
Te partías con los voluntarios: uno actuaba tímidamente y el otro con muchísimo entusiasmo. Fue divertidísimo.
La leyenda que vino después contaba como surgieron los cuatro ríos más importantes de China, que en su origen fueron cuatro dragones de diferentes colores que se empeñaron en salvar a la humanidad de una tremenda sequía en contra de la desidia de un importante dios. Finalmente se convirtieron en los ríos para dar agua dulce al pueblo chino. Muy bonita.
Le siguió un cuento corto, también muy gracioso sobre un marido despistado, una mujer celosa y un espejo que parecía cosa de magia.
El siguiente trataba del enamoramiento de la hija pequeña de un dios con un mortal y de cómo su madre quiso separarles a cualquier precio. Pero fue tan fuerte su amor que se les permitió verse una vez al año, que es el día de los enamorados en china.
Para el cuento final necesitó siete voluntarios que sujetaron las letras de una palabra muy importante, importantísima. Mientras explicaba por qué era tan importante, los peques iban descubriendo su letra con mayor o menor habilidad, haciendo que el público se carcajeara. La palabra es: Gracias. No podía ser otra.
Al final nos quedamos un ratito para ver la exposición de los dibujos que habían ido entregando los niños a la cuentacuentos. ¡¡Todos chulísimos!! Mis niños no hicieron ninguno porque son unos sosos para estas cosas. Que pena.
Gracias Akira Cómics por estos cuentacuentos tan divertidos organizados por Iván Marugán y Carmen Huertas. Gracias sobre todo a ésta última, la cuentacuentos, que se esforzó al máximo, a pesar de tener la garganta tocada, para que pudiéramos disfrutar a tope de este último cuentacuentos.
sábado, 22 de junio de 2019
El mago Dálux en la Show Festival de La Vaguada
Hemos vuelto al Show Festival de La Vaguada, esta vez a ver magia. ¡Nos encanta la magia! El mago Dálux era el encargado de encender la chispa de la ilusión en los ojos de los niños... y lo adultos... ejem.
Desde el principio se hizo con el público con su gracia y buen humor. Es un crack a la hora de animar el cotarro y que todos participemos en sus juegos y bromas.
Comenzó con un calentamiento de manos para atraer la atención de peques y mayores para meterse de lleno en divertidos trucos de magia intercalados con chistes e historias para que no paráramos de reír y aplaudir.
Impresionantes juegos de manos, alucinantes trucos con la baraja y objetos varios y mucha participación del público nos tuvo con los ojos muy abiertos durante la hora que duró el espectáculo. "¿Cómo ha hecho eso?, ¿cómo lo ha hecho?", se oía desde varios puntos de la terraza.
Sacó a un montón de voluntarios a los que sacó mucho potencial. Todavía me parto con el niño al que hipnotizó para que viera un pañuelo de uno u otro color y que se metió tanto en el papel que hablaba arrastrando las palabras y en plan robot, o la cara de la chica que veía peligrar su móvil (todos sabíamos que al final se tenía que salvar, pero ¡jolín! Yo sufrí un montón con ese truco, me imagino ella), la cara de pasmo de la niña del perrito de globo... Bueno, en ese truco todos nos quedamos pasmados cuando le dijo al perro que se hiciera el muerto. A mis peques se les caían las lágrimas de la risa.
Es un mago con un montón de recursos y se nota que tiene experiencia para amoldarse a todo tipo de públicos y circunstancias. Lo pasamos genial y mis dos niños le ayudaron en algún momento de la actuación (con la ilusión que hace eso).
Al final nos fuimos a casa con un dibujo que le regaló a Daniel durante su intervención firmado. Lo tenemos pegado en una de las paredes del estudio.
Aquí tenéis la programación de junio y aquí la de julio del Show Festival. ¡Hay para todos los gustos!
Desde el principio se hizo con el público con su gracia y buen humor. Es un crack a la hora de animar el cotarro y que todos participemos en sus juegos y bromas.
Comenzó con un calentamiento de manos para atraer la atención de peques y mayores para meterse de lleno en divertidos trucos de magia intercalados con chistes e historias para que no paráramos de reír y aplaudir.
Impresionantes juegos de manos, alucinantes trucos con la baraja y objetos varios y mucha participación del público nos tuvo con los ojos muy abiertos durante la hora que duró el espectáculo. "¿Cómo ha hecho eso?, ¿cómo lo ha hecho?", se oía desde varios puntos de la terraza.
Sacó a un montón de voluntarios a los que sacó mucho potencial. Todavía me parto con el niño al que hipnotizó para que viera un pañuelo de uno u otro color y que se metió tanto en el papel que hablaba arrastrando las palabras y en plan robot, o la cara de la chica que veía peligrar su móvil (todos sabíamos que al final se tenía que salvar, pero ¡jolín! Yo sufrí un montón con ese truco, me imagino ella), la cara de pasmo de la niña del perrito de globo... Bueno, en ese truco todos nos quedamos pasmados cuando le dijo al perro que se hiciera el muerto. A mis peques se les caían las lágrimas de la risa.
Es un mago con un montón de recursos y se nota que tiene experiencia para amoldarse a todo tipo de públicos y circunstancias. Lo pasamos genial y mis dos niños le ayudaron en algún momento de la actuación (con la ilusión que hace eso).
Al final nos fuimos a casa con un dibujo que le regaló a Daniel durante su intervención firmado. Lo tenemos pegado en una de las paredes del estudio.
Aquí tenéis la programación de junio y aquí la de julio del Show Festival. ¡Hay para todos los gustos!