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jueves, 18 de diciembre de 2014

Mobi y Fono nos enseñan la historia de las Telecomunicaciones

Telecomunicaciones significa comunicar en la distancia. No tenía ni idea, pero lo aprendí ayer en un evento que organizó el Espacio Fundación Telefónica para presentar una nueva aplicación muy divertida y educativa. Y se me ha quedado grabado.

Casi me la pierdo, porque Daniel salió bastante malo del cole. Decidí al momento mandar un email disculpandome por no poder asistir, pero a mi hijo mayor casi le da un telele. "Yo quiero ir a la fiesta. Yob quiero iiiiiiirrrr" Insistía una y otra vez. Así que me convenció y cogimos los tres el metro a ver que nos esperaba, porque en la nota de convocatoria sólo ponía que íbamos a jugar y aprender con un tal Mobi y un tal Fono.

Nada más llegar nos los presentaron. Eran los protagonistas de su libro videojuego pensado, principalmente para tablets, pero que se puede descargar en cualquier dispositivo gratuitamente aquí. ¡Todo un regalazo de Navidad! Mobi es un móvil de los de ahora y Fono un teléfono de los de dial. De hecho, tenían uno encima de la mesa, sacado de la colección de su exposición permanente.

Le preguntaron a Daniel si sabía cómo funcionaba y se sorprendieron un poco al ver que sí que conocía el funcionamiento. Me contaron que lo normal es que no lo sepan porque nunca hayan visto uno. Recordando, recordando, caí en que habían tenido uno de juguete y probablemente se acordaran de que se daba vueltecitas a la rueda metiendo el dedo en el agujero del número correspondiente.

También les preguntaron a los dos sobre el personaje que les gustaba más. El mayor se quedó con Mobi sin pensárselo. En cambio Iván se decantó por Fono, porque "tenía un móvil en la cabeza". Curiosa y equivocada apreciación.

De repente bajaron los típicos vasos comunicantes hechos con un cordón y dos vasos de plástico. Fue todo un éxito entre los niños. Sobre todo con Iván que no soltaba su extremo ni de broma y, a veces, hasta se hacía con los dos vasos para él sólo.

Por fin, llegó el momento que los peques estaban esperando. Nos repartieron una tablet por familia y nos presentaron cara a cara el libro digital e interactivo "Descubriendo las Telecomunicaciones con Mobi y Fono". Huelga decir que a mis dos retoños los tenía completamente hipnotizados. Y eso que no es para su edad. Está dirigido a niños de entre 6 y 12 años, pero estos todo lo que sea juego online les fascina. Daniel se enamoró de un minijuego en el que tenías que descifrar unos jeroglíficos para elegir la puerta correcta y llegar hasta la tumba del Faraón. Como ni sabe leer todavía, ni conocía la respuesta a preguntas como "Cleopatra se bañaba en ella" se dedicaba a la prueba y error hasta que llegaba y conseguía su estrella. Porque si pasas las pruebitas te van dado estrellas y cromos para que rellenes un álbum online. Pura gamificación. Me encanta. Las pruebas tenían muchos niveles de dificultad. A Iván le encantaron las de buscar objetos y las de las diferencias, por ejemplo. Pero todo lo que conllevara conocer los números y las letras se las saltaba sin contemplaciones.

Cómo casi desde el minuto cero los chiquillos comenzaron una cruenta guerra para apoderarse de la tablet, los organizadores fueron muy amables y nos dieron otra para que no tuvieran que compartirla. Y para que la madre respirara un poco tranquila por fin. También les dieron unos cromos muy bonitos que les encantaron. Sobre todo, el de Egipto.

Al terminar la presentación, de la que sólo me enteré de la mitad porque estaba más atenta de las evoluciones de los peques y del libro interactivo en si. Nos invitaron a asistir a una charla sobre la aplicación educativa y los jóvenes y las nuevas profesiones. Sonaba muy interesante, pero con los peques tan revolucionados no me atrevía a entrar. También nos propusieron una visita al Espacio Fundación Telefónica que pintaba muy bien. Pero ya era tarde, así que me la apunto para otra ocasión. Por si os interesa, la entrada es libre.

En cuanto, recogieron las tablets, Iván comenzó a berrear como un loco y a clamar por ella. De nada sirvieron mis promesas de que en casa le daría la nuestra y le pondría el juego sin perder ni un segundo. Se portó horriblemente mal durante todo el viaje de vuelta. Menos mal que la gente del metro que me tocó alrededor era majísima y sonreían ante la rebeldía del menor de mis hijos. Al final se ganó ser castigado sin tablet... ¡toda una semana!



8 comentarios:

  1. ¡castigado! jejeje no es por fastidiar... pero seguro q encuentra otra cosa para divertirse durante la semana :)

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    1. Estoy totalmente de acuerdo. En realidad, les he restringido las pantallas a un día a la semana, así que cuando le castigo una semana, se traduce en un día jajaja. Y de todas formas, estoy segura de que no vamos a parar y que ni se va a acordar. ese día es que lo pillé en caliente ;)

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  2. No hay sarao al que no te apuntes, jajajajaja!
    Qué recuerdos esos teléfonos de dial, ains...
    Muas!

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    1. Es que estos eventos molan. Hacemos cosas diferentes y divertidas... y encima aprendemos. ¡Que más se puede pedir. ¡Ah! ¡Sí! Encima suele haber merienda, aunque la disfrutan los peques porque yo demasiado hago vigilando que no la líen jajaja

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  3. Jajajaja. Si es que son dos fierecillas... Qué bonitas son las telecomunicaciones!!! Bueno, vale, yo es que trabajo en ellas... Un besote.

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    1. A mí eso de comunicarme en la distancia también me mola mogollón ;)

      Aunque yo mas bien trabajo en los contenidos y ni pajorera idea de cómo funciona la cosa jajaja

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  4. espero que Daniel este mejor...ay estos trastos, si es que se merecen castigos o sino se nos suben a las barbas!!jiji
    un besazo tesoro!!

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    1. Pues hoy se levantó con fiebre y mañana no sé si podrá ir a su fiesta de Navidad en el cole. Probablemente le deje ir si se levanta sin fiebre porque le hace mucha ilusión.

      Muchas gracias por preguntar. Eres un sol :D

      Y sí que se me suben a las barbas. Es que soy una blanda... snif snif

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