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jueves, 30 de junio de 2016

Protextrem: belleza y salud en la piel

Recientemente, acudí a un evento organizado por laboratorios Ferrer, en el Petit Palace Lealtad Plaza,en el que nos iban a hablar de sus protectores solares Protextrem. Pensé que serían parecidos a los de siempre aunque con elementos de mayor calidad para proteger nuestra piel del sol amenazante, pero me llevé una gran sorpresa. En estos laboratorios saben de buena tinta que la salud y la belleza van de la mano y nos presentaron unos productos ideales para cuidarnos sin olvidarnos de la estética. Además, de las cremas para niños cuyo punto más relevante es que no llevan agentes químicos que pueden llegar a irritar y dañar nuestra piel, ni te cuento ya la de un bebé.

Pero voy a empezar por el principio. Que nos dé el sol tiene cosas buenas: la vitamina D, el bronceadito favorecedor, alimenta el optimismo... Pero la otra cara de la moneda puede ser terrible: daños irreversibles en la piel, eritemas, alergias, envejecimiento prematuro, liberación de radicales libres, carcinomas... Los rayos UVA, UVB e infrarrojos afectan a la piel, aunque el sol no caliente, y dañan nuestra piel, aunque no lo notemos en un principio. Por eso es más que aconsejable que usemos protectores solares durante todo el año, tanto en verano, con mayor razón, como en invierno.

Y no vale solo con untarse la cremita de turno y listo. De eso nada. Hay que saber cómo hacerlo como con todo en la vida. Si un bote de crema te da para todo el verano, algo estás haciendo mal. La proporción que tenemos que aplicar es de 2 gramos por centímetro cuadrado previo calentamiento de la crema en nuestras manos. Tenemos que renovar cada dos horas y si estamos hablando de inmersiones en el agua mucho antes. Cuidado con esas zonas escondidas de las orejas, cuello, manos y pies. También se queman y hay que untarlas bien de crema.

Otro dato a tener muy en cuenta es que ningún fotoprotector nos protege al 100% de los efectos adversos del sol. Por eso hay que escoger el que mejor se adapte a nuestro tipo de piel, el más eficaz y el más sano. Para lograrlo debemos aprender a leer bien la información sobre el producto y entender lo que nos está contando.

Normalmente, los protectores solares sólo protegen de los rayos UVA y UVB, pero últimamente han aparecido algunos que también sirven de barrera contra los infrarrojos, con lo que son más efectivos. También es importante fijarse en que la crema tenga la menor cantidad de filtros químicos posible (moléculas sintéticas que absorben los fotones de la radiación solar). Es mejor que tenga filtros físicos (partículas minerales que actúan por reflexión y dispersión), aunque es difícil conseguir una textura agradable sin los químicos y muy pocos laboratorios lo han conseguido.

Los protectores infantiles tienen unas características especiales debido a su sensibilidad ya que no tiene las defensas que tienen las de los adultos. Por eso tenemos que asegurarnos que su base esté hecha a base de filtros físicos, que la protección sea alta, que no irrite ni produzca alergias, que sea resistente al agua y que la fórmula esté adaptada a la especificaciones de la piel de los niños.

También nos habló de cremas para pieles sensibles o alérgicas y de cómo hay fotoprotectores que nos defienden de los radicales libres, principales causantes del envejecimiento prematuro y los carcinomas en la piel. Ella aconsejó la vitamina C, el gran antioxidante por excelencia para potenciar esta defensa. La piel es una barrera protectora hacia agentes externos como el sol, pero tiene un límite. Si abusamos se deteriora sin remedio. Encima tiene memoria, lo que significa que los daños, aunque se reparen, siguen latentes.

Para finalizar nos dejó alucinadas con una crema de protección solar que, a la vez es anticelulítica: Sun & Slim. ¡Menudo invento! Y otra crema para el rostro que, además, imprime un color suave para animar nuestros rostros y que ella aconsejó dar debajo de los polvos que usemos habitualmente para matizarla. ¡Que maravilla! Guapas y protegidas. ¿Se puede pedir más?

Nos fuimos del hotel encantadas con la charla y deseando probar los productos de nuestras bolsas. ¡Ah! y con un osito de peluche monísimo por cortesía del Petit Palace.


Esta mañana estrené la crema infantil y les ha encantado. El pequeño ha comentado que es muy gustosa, suave y huele taaan bien. El mayor está emocionado con el 50+ que ha visto en el bote. "¿Esto es más que cincuenta? ¡Ualaaaa!". Me encanta lo intensamente que viven cada detalle.






7 comentarios:

  1. Fue una charla súper interesante con muchos datos. La verdad es que es muy importante saber cómo proteger bien a los peques para evitarles daños futuros. A ver si les creamos hábito y lo mantienen x muchos años, porque ya sabes... El momento crema siempre les parece un tollo. Un besote!!!! Genial el post!

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    1. A los peques y a los mayores porque siempre pensamos en ellos y al final nos descuidamos nosotras muchísimo. A mí me pasa igual con el momento crema. Acaba encremado el sofá, el bañador, el gato... jajaja
      Muchas gracias

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  2. Fue muy interesante y aprendí muchas cosas. ¡Qué rápidez escribiendo! ^.^

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  3. No te pierdes una, jajajajaja!
    Yo tengo un suspenso en cremas solares. Me las pongo, pero no siempre y no siempre a tiempo (con Peque estoy mucho más al loro, eso sí).
    Muas!

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    1. Yo también suspenso, pero parece que con el plus de crema reductora me animo más a ponérmelo jajaja

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  4. Yo ésta marca la probé el año pasado y me parece buena en comparación con otras.

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