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viernes, 21 de diciembre de 2018

El fin de la inocencia navideña

- Mamá, tengo que hablar contigo... a solas.- Me soltó Daniel muy serio.- Lo que me digas puede cambiarme la vida.

Ostras, que miedo. Le dije que podíamos tener una reunión privada y le prometí a su hermano que luego tendríamos otra él y yo.

Una vez sentados le miré expectante.

- Creo que ya sabes de lo que quiero hablarte. - Comenzó muy serio.

- Creo que sí.- afirmé a mi vez en el mismo tono.

- Esta bien mamá. Confiesa de una vez: Los Reyes sois los padres.

- ¿Estás seguro de que no quieres dejar esta conversación aquí? Estamos en un punto de no retorno.

- Estoy seguro.

- Está bien. Los Reyes somos los padres.- Qué queréis. Me pilló con la guardia baja. El peque parpadeó un par de veces muy rápido y arrugó la frente.

- Ya lo sabía. ¿Te digo por qué lo sabía?

- Estoy deseando saberlo.

- Primero, porque me lo había dicho un amigo. Segundo, porque a los pobres no les traen regalos. Y tercero, porque el año pasado os grabé poniendo los regalos debajo del árbol.

- Síiiii. Claaaaaro.

- Que sí, te lo juro. Dejé la cámara encendida en el salón. Pero tuve que borrar el vídeo porque no quedaban minutos para hacer otros vídeos.- No le creí ni por un momento.

- De todas formas, Daniel, tienes que saber que esta historia de los Reyes forma parte de un juego que se llama La ilusión de la Navidad, y que tú hermano aún juega, así que no se lo estropees. Es más a los padres también nos hace mucha ilusión todo esto. Y me da mucha pena que te hayas salido del juego.

-¿Quéeee? Yo quiero jugar. No quiero salirme. No quieroooooo.- Cómo veía que empezaba a hiperventilar cambié el discurso.

- Hombre, que tú formas parte del juego, pero como personaje no jugador, como en el rol. A ver como te lo explico... tú ayudas a que el juego funcione, como los papás.

- Pero yo quiero ser un personaje jugador, ¡quiero jugar! Espera ya sé. Yo puedo ser un duende. Síiii. Eso, un duende que os ayude a poner los regalos.- ¡¡¡Danger, danger, peligro peligro!!! Piensa Dácil, piensa.

- Daniel, lo de poner los regalos es cosa de adultos. Si quieres dejar de ser un niño para convertirte en un adulto sólo recibirás un regalo como papá y mamá. Así que elige cual es el que quieres.- Casi me da la risa con la cara de pasmo y susto de mi churumbel.

- Pero yo quiero toooodos mis regalos. No, no. Yo soy un niño. UN NIÑO. Y quiero jugar.

- También podemos hacer como si esta conversación no hubiera existido nunca. Es que me da mucha pena que te hayas enterado tan pronto.

- A ver mamá, que ya estoy en cuarto de primaria. Y algún día me tenía que enterar. Si no, imagínate. ¡Mis hijos no recibirían regalos! cuando sea padre les haré un montooooon de regalos. Oye, por cierto. ¿Entonces compráis vosotros los regalos? ¡¡¡¿Y de dónde sacáis el dinero?!!!

- Pues ahorrando y con mucho esfuerzo. A ver qué te crees.

- Eres la mejor madre del muuuundo. ¡Oye! Y los regalos de las abuelas y los tíos, ¿también los compran ellos?

- Sí

- Ooooooh. - En ese momento, su expresión reflejó un amor infinito por sus familiares.- Mami, tengo una pregunta más. Si los Reyes no existen... ¿Quienes son los de las cabalgatas?.- Oportunidad única en bandeja jejeje

- Eeeeeh, hombre, pues yo supongo que serán los Reyes Magos de verdad que hace mucho tiempo sí que llevaban los regalos a los niños, pero que ahora, como somos muchos más, no les llega la magia y por eso lo padres les ayudamos.

- O gente disfrazada.

- Eso puede ser también.

- Bueno, pero me gusta más la teoría esa de ayudarles. Así les ayudo yo también.

- Pero no como duende. Eeeeeh.

- No, no. Yo soy un NIÑO.

Por cierto, luego tuve que tener una reunión con el otro churumbel y aguantar quince largos minutos de disertación profunda sobre las maravillas de Fortnite.




14 comentarios:

  1. Oh...que pena que ya lo sepa. Mi mayor está es tercero....y ya empiezo a ver el fin de la magia. No creo que tarde mucho más en saberlo.
    Un abrazo y felices fiestas!

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    1. Sí que es una pena porque la ilusión también la vivimos los padres y cuando se acaba es un palo. De todas formas, Daniel sigue entusiasmado con las Navidades. Menos mal!!

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  2. Bufff...¡¡menuda seriedad!! mi niño mayor hasta para esto me lo ha puesto mucho más fácil...

    Lo que me ha dejado muerta es la idea de q os haya grabado en video!!! o al menos que se le haya ocurrido planteartelo...

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    1. Yo creo que se estaba marcando un farol. Me cuesta mucho creer que nos haya grabado, pero él se monta ese tipo de historias y lo peor es que acab por creérselas. A saber lo que pasa por la cabeza de estos peques. Y sí, se pone muy serio cuando la ocasión lo requiere, así que tuve que seguirle el rollo. para él era una tema importante ainss

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  3. Me he reído un montón con la conversación sobre el Fornite! jajajajaja
    es una lástima que lo sepan, en mi casa además, como solo hay un niño, ya no está la magia de la inocencia (que es lo bonito)
    atesóralo, porque es un bien muy preciado que le das importancia cuando lo pierdes.
    Un beso!

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    1. Sí que es una pena. Es que es tan bonito verles disfrutar de la magia de la Navidad... Buenos, aún así creo que lo va a disfrutar, pero de diferente manera :D
      La conversación sobre fortnite fue un poco infernal porque yo no tenía ni idea de lo que me hablaba, que si skins, que si kills...

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  4. Qué penita, nosotros al Monstruito1 también se lo dijimos el año pasado pero lo hicimos nosotros directamente porque empezamos a ver que sus compañeros se lo decían y queríamos ser nosotros los que lleváramos la conversación.
    Encontré una carta, escrita por los reyes magos, donde explica que los reyes pidieron a los padres que les ayudaran y por eso los regalos ahora los damos nosotros y que ahora que es mayor tiene que mantener el secreto para que su hermano viva con la misma ilusión. La pusimos directamente en el buzón y cuando llegó se fue a su cuarto a solas a leerla y pilló una plorera buena, pero después nos dijo que nos ayudaría y que haría que su hermano siguiera con la ilusión.
    Una pena que lo vayan sabiendo pero se hacen mayores y no lo podemos evitar :(

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    1. Ay pobre... Si es que es tan emocionante vivir la ilusión de la Navidad que cuando se acaba nos da mucha pena a todos los implicados, pero podemos vivirla de otra manera.

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  5. OHHHHH...jo,que la mía tiene la misma edad...Pero qué bien traido todo. Ojala nunca se enteraran, verdad??? Un besote

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    1. Ay sí. Ojalá no se enteraran nunca, pero como dice Daniel, si se pega toda la vida esperando que los reyes traigan los regalos sus hijos no recibirían ninguno. Gracias por tu voto de confianza. Yo creo que lo hice fatal jajajaja Pero es que me pilló muy cansada y con pocas ganas de darle al coco ;)

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  6. Qué difícil! Alex se dio cuenta con 6 años y fue esencial para que su hermana mantuviera la ilusión hasta los 8. Cuando en la tele meten la pata (y no veas la de veces que lo hacen) él cambiaba la conversación.

    Tu charla con Dabiel es pura magia.

    Besos

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    1. Que pronto se enteró Alex!!! Es que se nota que es muy observador. Es verdad que en la tele meten la pata. Y en todos sitios, que hay gente que piensa que los niños son sordos. Te lo aseguro. Menos mal que los míos tienen atención selectiva y no escuchan lo que no les conviene. Como les encanta la magia de la Navidad... Pero otra cosa es cuando un amigo te lo suelta directamente, ahí el cerebro no puede disimular.

      Yo creo que con Daniel lo hice un poco mal y me faltó tactio. Pero es que ese día me pilló muy cansada y no me dio la mente para imaginar respuestas convincentes. Y menos con el testimonio de su amigo por medio. Buuuf, que difícil

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Me encanta saber lo que piensas.