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viernes, 9 de marzo de 2012

Odisea peluquera

Daniel tiene una mata de pelo impresionante. Como es invierno no le podemos meter la maquinilla con lo que se hace más difícil mantener sus greñas a raya. La última vez que Raúl le metió la tijera fue el día de Reyes y el chiquillo se portó muy bien. Hoy decidió que el flequillo le molestaba en los ojos y decidió que había llegado la hora de nuevo de retocar el cabello de su hijo, pero esta vez Daniel tenía el día tonto y no pensaba ponérselo fácil.

La mami quiso poner su granito de arena y le conté milongas al peque mientras berreaba aterrado ante la sola presencia de las tijeras. Le dije que guardaríamos el pelo, que lo pegaríamos en un folio para hacer un dibujo, que él podía cortar el pelo de mama... Eso le gustó bastante. Al final me corté un buen tajo yo misma para que viera que no dolía (aunque él ya lo sabía de ocasiones anteriores). Daniel se rió parecía que por fin se iba a dejar hacer, pero Raúl me quitó las tijeras bruscamente oliéndose el desastre. Yo no soy muy buena en estos menesteres. Así que el chiquitín volvió a las andadas. Haciendo tripas corazón me acerqué nuevamente las tijeras a mi maravilloso corte de pelo para volver a profanarlo cuando mi marido volvió a quitármelas horrorizado. "Ni se te ocurra volver a meterte un tajo en tu pelo".

Al final parecia que el niño se tranquilizaba. Su padre aprovechó para hacer las labores de peluquería, pero al primer tijeretazo se puso de nuevo histérico y no hubo manera de proseguir. Le quedó un trasquilón feísimo. Le dejamos estar porque ya se había puesto muy brutito, pero Raúl no puso eviatr la tentación de mal acabar el trabajo durante el sueño del pequeñín.

7 comentarios:

  1. jejejejejejeje pobrecico!! verás cuando coja la tijera el mismo y se quede sin flequillo.....

    Espero que lleves bien la vuelta al trabajo!

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  2. Eso lo hice yo alguna vez cuando era pequeña jaja. Qué sustos le daba a mi madre.

    La vuelta al trabajo la llevo muy bien. Lo malo es lo poco que duermo. Estoy siempre cansada.

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  3. me suena el tema pelos jajaja!! yo un dia ya cansada de ver los trasquilosnes de mi niña fuimos a mi peluqueria....fue un caos ,terrorifico y eso que era mas pequeña que Daniel(creo que tiene dos años...??)bueno que buscamos una pelu de niños pequeños y aunque tenemos que ir en coche a la ciudad fuera del pueblo.y no te negare que la guerras continua ,es mas la pobre peluquera le teme cuando le ve jajajajaja!! el caso es que poco a poco se va entre comillas dejando....yo ni me planteo cortarle el pelo.primero por miedo y segundo una profecional con las tijeras con niños pequeños es fantastica.Nota que guapisimo es viestro Daniel con o sin flequillo jajajaj

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  4. Perdon por las faltas...perofecional NO JAJAJAJ profesional.....aichhhh......

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  5. jajaj la verdad es que ha sido toda una odisea!!! Pobre, a algunos niños le dan panico la peluqueria y menos mal que estaba tu marido cerca para evitar una catastrofe en tu pelo jeje Besitos,tienes unos peques preciosos.

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  6. Chenchu, tu eres de las mías. Nos liamos a escribir y justo cuando le damos al botón de publicar vemos la errata. Y ya no podemos hacer nada jaja. Pobre peluquera. Nosotros no hemos probado a llevarle a una peluquería aunque me temo que nis la iba a liar también.

    Rocío, lo que hace una por su hijo. Hasta estropearse su carísimo corte de pelo. Que pena que el sacrificio no me sirvió de nada ;)

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  7. Parece facil el trabajo del peluquero..pero nada mas lejos de la realidad...
    Yo tambien he intentado alguna vez hacer de paluquera...y lo tengo prohibido..el pobre niño no quiere ni salir a la calle...en fin todo sea por la moda

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