Páginas

miércoles, 23 de mayo de 2012

Un día perfecto, una noche de pesadilla

Noticias buenísimas. Maravillosas. Esta mañana hemos llevado a Iván al cardiólogo y el facultativo se ha quedado sorprendido de lo bien que está el pequeñajo. Tiene un reflujo leve y la cardiopatía no ha ido a más. Piensa que pueda tener una infancia tranquila y es probable que no tengan que intervenirlo de nuevo antes de los cinco años. Nos pegamos esperando toda la maldita mañana, pero valió la pena.

De camino a casa pasamos a ver las listas del colegio: ¡Admitido! Otra preocupación menos. Cuando vi que su amiguito Luis se había quedado fuera casi me da algo, pero luego su madre me aclaró que había sido un error y que estaba dentro también. ¡Menos mal!

Raúl y yo nos fuimos con el bebé a comer fuera para celebrarlo. Nada del otro mundo. A un vips para algo rápido porque antes de las cinco tenía que recoger a Daniel de la guardería. Por nosotros hubiéramos abierto el champán y las fresas, pero el deber nos llamaba a cada uno por un lado.

Fui corriendo a por el mayor al colegio. Una vez en casa jugamos los niños y yo un ratito. En un momento dado, los peques se entretuvieron solos un ratito y me dejaron tiempo para echar un vistacillo al ordenador y... ¡oh! Sorpresa, sorpresa. Madre desesperada era coganadora de una camiseta en el concurso aniversario de Papacangrejo. Vaya alegrón me llevé. La verdad es que el certamen fue muy emocionante y divertido. Lo malo fue que olvidé decirle al organizador que gppgle me hace malas pasadas y en los comentarios aparezco como "Madre desesperada" y en los seguidores como Dácil Muñoz, así que le hice un poco de lío.

Con Iván en la cuna y Daniel a medio cenar me despedí con besos para ir a cenar con mis amigas (por fin habíamos logrado ponernos de acuerdo para quedar después de siglos). Mi niño mayor me preguntó por qué me iba. Le contesté que había quedado un ratito con las amigas, pero que estaría en casa antes de que pidiera el biberón nocturno. El restaurante estaba a escasos metros de mi casa con lo que podía hacer una escapada cortita.Y así fue. A las doce menos cuarto entraba por la puerta, agotada pero feliz.

Me metí en la cama muy a gustito cuando... Empezó la pesadilla. Daniel e Iván me hicieron pagar caro que les abandonara un par de horas por mis amigas. ¡No me dejaron pegar ojo en toda la noche!

8 comentarios:

  1. Pero que alegría!! Que dia tan estupendo. No sabes lo que me alegro que el peque esté tan bien, se que lo habeis pasado muy mal y no es para menos. Ahora todo va a ir sobre ruedas. Enhorabuena tambien por lo del cole y porque encontraras un rato para salir que te lo mereces y mucho. Besitos y descansa un poquito esta tarde.

    ResponderEliminar
  2. Cómo me alegro de las noticias buenas, Dácil. Y qué guapos están, la verdad es que parece que fue ayer cuando nació Iván y ya está hecho un hombrecito.

    Hazme el favor de no sentirte culpable por salir un poquito, que también te lo mereces.

    Besos mil

    ResponderEliminar
  3. Los dos?? pues si que se pusieron deacuerdo. Espero que hayas podido descansar. Por cierto, felicidades por esa admisión, que bien no?. Me alegro muchísimo
    Un besazo!

    ResponderEliminar
  4. FElicidades!!!si que son buenas

    ResponderEliminar
  5. Mejores noticias imposible, me alegro mucho. Imagino que habras podido descansar algo.
    Besitos...

    ResponderEliminar
  6. Ay ojalá todos los días tengan tan buenas noticias, sobretodo la primera. Esperemos que Iván sigue con ese progreso tan positivo.
    Besos

    ResponderEliminar
  7. Cuántas buenas noticias juntas!!! Seguro que una noche de insomnio no opacó para nada lo feliz que debías sentirte por tantas cosas buenas que te habían pasado. Piensa que, lo mismo, tampoco hubieses podido dormir por el subidón. Besotes!!!

    ResponderEliminar
  8. Muchas gracias a todas. La verdad es que aunque todo lo demás hubiera salido mal y no hubieran admitido a Daniel en el cole que quería me hubiera dado un poco más igual porque lo importante ahora mismo es la salud de Iván. Salimos de la consulta casi bailando y con una sonrisa de oreja a oreja. El bebé salió enfurruñado porque no le dejábamos dormir :D

    ResponderEliminar

Me encanta saber lo que piensas.