Así como Daniel llamó pitu al chupete hasta que lo soltó, Iván lo llama tete. "Tete, teteeeeee" chilla cuando hecha de menos su textura gomosa tranquilizadora. Y yo se lo facilito cómo madre blanda que soy. Me echo a temblar pensando en el día en el que se lo tendré que quitar. Ahora le da un consuelo increíble. El tete y el regazo de mamá son sus combinaciones favoritas.
Bueno, si ya conseguiste quitar un pitu, seguro que consigues quitar un tete. Jajaja. Besotes!!!
ResponderEliminarGracias por tener tanta fe en mí :D
Eliminarque guapos!! y cada uno lo llama de una forma hay que ver, cangrejito no quiso chupete nunca lo tuvo más de 30 segundos, en fin, cosas de extraterrestres!! jeje
ResponderEliminarPues a estas edades es un tapabocas excelente jajaja
EliminarPero en unos meses se convierte en un infierno y una cruenta batalla para quitárselo :S
Yo le estoy haciendo un cuento para dejar el TETE....... a ver si lo consigo, si es así te lo paso.
ResponderEliminarUn besete
Síiiiii, por favor!!! Me encantaría que me pasaras el cuento. Gracias.
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