Zapatos Rojos y los siete trolls

El domingo tuvimos la suerte de poder asistir al preestreno de Zapatos Rojos y los siete trolls, una versión muy alocada de Blancanieves y los siete enanitos que nos hizo reír y emocionarnos.

¿Cuál es la mujer más bella? Si hacemos caso al dicho depende de quién mire. En este relato fantástico, ideal para toda la familia, la protagonista femenina tiene muy claro su lugar en la vida y no duda en aprovechar las herramientas que le va poniendo delante la vida, aunque el “hechizo” del amor, como lo llama ella, la hará sufrir por cosas que antes ni se había planteado, como, por ejemplo, su figura oronda.

Esa fuerza de Blancanieves será la que haga replantearse al Merlín pagado de sí mismo, el protagonista masculino, todas sus creencias y convicciones. ¿Podrá el amor hacer que se le caiga la venda de las etiquetas sociales de los ojos y empiece a darse cuenta que la belleza no tiene nada que ver con la bondad de una persona?

El mensaje llega alto y claro a los peques que sigan las aventuras de la intrépida, y algo entrada en carnes, heroína del cuento. Nuestra princesa no dudará en hacer uso de todo lo que sea necesario para cumplir su misión: encontrar a su padre, aunque vaya en contra de sus propias creencias. Si hay que convertirse en un bombón para conseguir ayuda, pues se hace. 

Tampoco es la típica protagonista que no necesita que la salven porque ella puede con todo. Aquí se refleja que cuando necesitas ayuda, lo mejor es pedirla. Y eso se refleja tanto en los personajes masculinos como en los femeninos, aunque en los primeros el orgullo les hace tropezar alguna que otra vez.

La crítica social es feroz, sobre todo hacia los hombres que se vuelven tontos ante una mujer hermosa. Hasta a los siete simpáticos protagonistas verdes les afecta este encantamiento tan habitual en nuestra sociedad actual. Aunque, al protagonista tienen que presentarlo como que en el fondo no es tan superficial. 

¿La gente es más amable con las personas agraciadas que con las que lo son menos? Pues desgraciadamente ocurre. ¿Hubieran ayudado los trolls a Blancanieves si la hubieran visto en su forma original? Es una pregunta que se plantea en un momento de la película y la respuesta es un fiel reflejo de la sociedad en la que vivimos. Aunque al protagonista le gustaría contestar que sí, acaba por confesar que de buenas a primeras probablemente no. Si juzgamos a las personas por su apariencia y perdemos la oportunidad de conocer a las que no nos agradan visualmente nos perdemos maravillosas personalidades que no se pueden detectar a primera vista.

Esta película se estrena el 17 de abril y es una opción estupenda para disfrutar en familia y enseñar valores a los niños que vayan más allá de prejuicios tontos.