Las cartas de Reyes

Este año está siendo una loa a la improvisació. Hacemos todo en el último segundo, sin preparación y cómo salga. ¡Ole!

Tenemos varios motivos para ello. El principal: el COVID, que no nos deja vivir con normalidad ni hacer planes a largo plazo de ningún tipo.

Y así nos está pasando con la carta de los Reyes Magos. Que ya estamos en diciembre y la casa sin barrer. ¡Vamos! Que lo peques no saben ni lo que quieren, pero sí que el 25 y el 6 quieren tener algo esperándoles debajo del árbol.

Así que he tenido que meterme por medio a manip... digooo, a organizar un poco el tema. Me da rabia porque, en realidad, esto sólo es una prueba de que NO NECESITAN NADA y de que piden por pedir. Otro año hubiéramos tirado por la opción de los parques reunidos o similar, porque, está claro, que el año que lo trajeron los Reyes triunfó. Pero con el bicho dando vueltas por ahí no tenemos ningunas ganas de meternos en colas y multitudes. También pensamos las gafas de realidad virtual de la PS4 (regalo familiar megachulo y ya no hay nada más que pensar), pero no la recomiendan para niños menores de 12 años. Así que tampoco. Con las ganas que tenía de irme a hacer turismo por youtube (que me han dicho que también sirve). En fin, nos lo guardamos para otro año.

Como estos dos tienen un lío en su mente muy enrevesado nos ha tocado a los padres poner orden.

- A ver, ¡churumbeles!, ¿Qué os gusta?

- ¡Los videojuegos! - Eso lo teníamos claro, pero con los juegos gratis que se bajan y el PS now van bien servidos. Y pagar por skins, pases y porquerías de esas me repele (lo siento niños).

- ¡Un móvil!- Lo intenta Daniel, pero no cuela. A día de hoy tienen mi samsung 6 para hacer sus vídeos y fotos, jugar juegos para móvil y usar divertidas apps. Sin nombrar sus tablets, que, según dicen, son bastante antiguas, pero funcionan perfectamente también.

- Nada de móviles ni juguetes basados en soportes digitales que son como vuestros dispositivos digitales pero capados.- Corto yo. Usemos la cabeza, por diossss.

- Pues el PS plus.- Sugiere tímidamente Iván.

- ¿Pero eso no lo tenéis yaaaa?

- Noooo, lo que tenemos es PS now.- me explica el mayor. Jolín que lío. 

- Vale, vale. Ya tenemos una cosa muahahaha

- Mamá, que te sale la risa malvada y estamos hablando de temas navideños.- Me corta el pequeño.

- Perdón, perdón. Es que me estaba acordando de los buenos tiempos cuando os lavaba el cerebr... digooo, cuando os dejábais aconsejar por vuestra sabia madre. En fin sigamos. ¿Qué más os gusta?

....

....

...

- ¡Los juegos de mesaaaaa!- Se oye al padre por detrás.

- Hasta que no juguemos todos los que tenemos en la lista de espera, no se compr... digooo, no entran más.- Caritas de cordero degollado, ainssss...- Bueeeeno, pero no quiero nada de proyecciones digitales que luego jugáis media vez y si te he visto no me acuerdo.

- Vaaaaale.

- Pues ya tenemos PS plus y un juego de mesa para cada uno. ¡Buf! Vamos fatal. A ver. ¡Concentraos! Mmm... ¿No os gustaba dibujar?... Pues algo para dibujar. A ver... tenéis lápices, ceras, rotuladores, acrílicos, acuarelas, pinceles a punta pala, cuadernos... Buf... ¿Y un proyector para dibujar dibujos que saquéis de internet?

- ¡Síiiiiiiiiiiiiiiiii!- Genial, genial... Me froto las manos (cuando me puse a investigar, me di cuenta de que la cosa no iba a ser tan fácil. Creo que al final será un widget en plan mesa de luz que es más asequible y no falla más que una escopeta de feria).

- Y otra cosa que os gusta es... es... ¡la magia!- Caras de interés.- Recuerdo que cuando éramos pequeños mi hermano tenía un juego con un montón de trucos de magia y nos hacía espectáculos muy chulos.

- Ooooh.- Los tengo en el bote.- Síiiii, queremos hacer magia como tío Fernando.- Afirmó pegando botes Iván.

- Y el tío Fernando también tenía una pistola de balin...

- ¡No!

- Pero...

- ¡No!

- P...

- ¡No!

- ¿Y un arma especial de esas de balas de gomaespuma?

- Mira en la enorme caja que hay bajo tu cama y en el armario de tu hermano y elige la que quieras.

- Joooooo.

- ¡Naaaaada de armas!- Ceños fruncidos y miradas aviesas no me hacen cambiar de opinión.- A ver Daniel...- Prosigo conciliadora,- ¿Tú no estabas el otro día cazando bichos con tu amigo e intentando meterlos en las casas de vuestras sufridas madres de contrabando en el bolsillo? (menos mal que les pillamos). ¿Por qué no te miras un equipo de esos de naturaleza?- No me hace gracia, pero su lista está bastante vacía.

- Síiii, ¡¡¡que buena idea!!! Quiero una caja chula para que vivan en casa.

- Pero yo me refiero más a una lupa, objetos de observación en la naturaleza... y luego soltarlos de nuevo en el campo...

- Nooooo. Nos los traemos a casita y los cuidamos.- Ainsss. Mirando por internet encontramos una cosa en la que metes tierra, plantas, agua... y bicho, sí. Bichos también. En fin... A la lista...

- Oye, y se me está ocurriendo que también podríamos pedir un telescopio...

- No sé Daniel, que eso de cargar con él hasta un lugar poco contaminado lo veo un rollo...

- No, si digo un telescopio para ver motas de polvo y sangre y eso.

- Tú dices un Microscopio.

- Pues eso.

- Bueno, no es mala idea... Venga apúntalo.

- ¡Ah! Y una cosa de Dragon Ball que vi en un catálogo. Espera que lo busco.- Se va corriendo a su habitación y me enseña la página dónde está su objeto de deseo.

- ¡¡¡Casi 50 euros un diorama del Torneo de las Artes marciales de mierrr..., digoooo de plástico porqueriosooooo!!! Tu flipas, hijo.

- Es que lo quierooooooo. Y lo pagan los Reyeeeeees- ¡Tendrá morro! Buf, acabo de despertar a la bestia de la Navidad "loquierotodo".

- Bueno, bueno. Tú apunta y ya veremos.- Le digo mientras le asesino con la mirada intentando que su hermano no se dé cuenta.

- Oye mami.- Continua Daniel.- Estoy pensando que podemos pedir algo para hacer chuches, o bombones... Vamos a buscar en internet...- En cuanto vio un kit con casita de chocolate incluida lo tuvo claro. Otra cosa más para su lista. Jolín. No teníamos nada y... menudo listo el mayor.- Y no olvides lo del Club Fortnite...

- Por encima de mi cadáver.

- Joooo. ¡Mala, tirana!- Cara de "que pena me da un niño que me sé yo que al final sólo va a recibir carbón".

....

- Vamos a repasar... Iván, ¿No se te ocurre nada más? Tú tienes poco...

- No ssssé...

- Vamos a ojear el catálogo, un poco...

- Mira, mamá. ¡¡¡El juego ese de golpear una ficha y meter gol al contrario!!!

- Y cosas pequeñas y que no ocupen sitio no os gustan nada, ¿no?.- Caritas de ilusión máxima.- Buf, bueno, apúntalo y ya veremos. A lo mejor no cabe todo por la ventana y eso, pero bueno. A ver..

- ¡Bieeeeeeeeeeen!.

Para no querer nada, al final tenemos unas cartas bien gorditas... En fin. Y encima me han dicho que hasta el 10 de diciembre, o por ahí, no las mandamos por si acaso se les ocurre algo más (Qué fuerrrrrte).

En fin, que ya se pueden dar prisa Papa Noel y los Reyes Magos en ir adquiriendo... digo... fabricando mágicamente los juguetes... (agobio navideño a niveles estratosféricos).