En este tomo, Koko toma la palabra y nos relata de una forma desternillante su visita al cuquísimo castillo de Nuna, donde todo es elegante, fino y... bueno, pues todo lo contrario a la educación que ha recibido la princesa negra, que hará todo lo posible por encajar... massss o menosss.
Así como Nuna nos contó en el segundo tomo su parecer del Norte, las tierras salvajes e inhóspitas de Koko, ésta última hace lo mismo del encantador reino del Este, tan lleno de peligros y traiciones como el de la princesa guerrera más oscura.
Volvemos a encontrarnos con viejos amigos, sin ellos faltaría algo en la historia, y con nuevos personajes, que dan mucha emoción a los acontecimientos. La amistad de las tres niñas se pondrá a prueba duramente y surgirán nuevas e inesperadas sorpresas. Desde luego el autor sabe enganchar a su público. Daniel está completamente fascinado por la sucesión de los acontecimientos.
Igual que en las entregas anteriores, encontramos capítulos cortos y páginas llenas de simpáticas y preciosas ilustraciones. Esto facilita la lectura de los niños y les motiva a continuar para conocer que pasa después. Los cómics siguen estando presentes y son las partes preferidas de mis dos niños. Creo que si fuera por ellos, todo el libro podría estar en este formato.
Seguro que volvemos a oír hablar de ellas |
¡Me encantan las ilustraciones! Un besote.
ResponderEliminarA mí también. Es un estilo muy simpático. A que sí? jajaja
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