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sábado, 31 de diciembre de 2011
El belén gigante
Parece que a Daniel le llaman mucho la atención los belenes. No podemos llegar a la guardería sin hacerle una visita la que han montado en el vestíbulo. Y cuando nos vamos... Más de lo mismo. Podría pegarse horas pegado a las figuras navideñas. Muchas veces me lo tengo que llevar a rastras.
Por eso decidimos hacer una excursión de tintes navideños para aderezar un poco las aburridas vacaciones del pequeñín. Nada mejor que el belén gigante de San Lorenzo del Escorial. Se trata de un montón de figuras de gran tamaño distribuidas por las calles principales del pueblo.
Al principio a Daniel le dieron un poco de respeto. Incluso en algún momento gritó: "Sutoooo", pero finalmente se fue emocionando con el nacimiento, las jirafas, el molino, el horno de pan, el rebaño de ovejas, el burro caído en las escaleras... Y terminó disfrutando el día.
Vimos sólo el grueso del belén, nos comimos unos deliciosos sanwiches y volvimos corriendo a Madrid habíamos quedamos a comer en casa de mi suegra.
Que chulo!! aqui solo hemos encontrado un belen..la verdad es que yo lo hecho de menos..y las niñas no saben ni que es practicamente...y que tiempo con sol y todo!!
ResponderEliminarenvidia total!!
un besote
¡Muérete! Mi cuñada vive en El Escorial y solemos ir a ver el Belén... Este año, como las cosas están como están no hemos ido.
ResponderEliminarUn beso.
Rachel, allí tendréis plaga de Papa Noel y pocos Reyes. Normal. Para el próximo año planteate organizar un belén viviente en el pueblo. ¿Te imaginas?
ResponderEliminarMayte, el próximo año quedamos. Estoy segura de que serán unas Navidades estupendas. No como estas... ejem ejem.
quye chulo!!!y que grande!!!
ResponderEliminarLa verdad es que no lo conocía. Una amiga me dijo que existía y me pareció muy original.
ResponderEliminarQue preciosidad! Yo me limito a visitar los nacimientos en las plazas de las tres ciudades hermanas, y a espíar algunos que los vecinos amablemente colocan en sus cocheras :D
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