Todo comenzó con una invitación... Lo investigadores más jóvenes y curados de espantos de Arkham asistirán a una terrorífica cena en la mansión de Howard Phillips, famoso escritor de novelas de terror. La experiencia les dice que van a encontrar algo más escalofriante que sospechosos platos gourmet. Y así fue, en cuanto se presentaron a la mesa el anfitrión les hizo partícipe de sus preocupaciones: Están pasando cosas muy extrañas y confía en vosotros para que la verdad salga a la luz... Sus palabras os inquietan, el escritor asegura que alguien está usando magia negra para fines de dudosa ética moral, pero podría ser todo producto de su delirante imaginación. Hay quien dice que está completamente loco.
A su derecha está sentada Lavinia Whaterley , su secretaria y mayor admiradora. Se ha convertido en su persona de confianza y gestiona sus asuntos con gran eficiencia. Es madre soltera y evita hablar del padre de su hijo Wilbur cuando sale el tema.
El hijo adolescente de Lavinia está sentado al lado de ésta, aunque cualquiera diría que tan sólo tiene 15 años. Parece mucho mayor y muy... extraño. Como si no fuera del todo humano. Es huraño y gruñón, pero puede que esto se deba a que está en plena adolescencia.
Al otro lado de la mesa se encuentra Keziah Mason, una eminente química de gran belleza y elegancia. Se rumorea que es una bruja. Una de las más poderosas y malvadas. Puede que esto se deba al gran interés que parece demostrar por un libro en concreto: El Necronomicón. Es la pareja de Herbert West en esta cena.
West es el médico personal de Howard. Todos saben que está loco por Keziah y que hará todo lo que ella le diga sin preguntas. Muchos piensan que esa relación le está llevando a la locura y que haría bien en alejarse de la eminente química
La última invitada es Lady Margaret Trevor. Dirige un rancho y se dedica al comercio de carne. Se le achacan malas prácticas en la explotación animal para criar a sus animales más gordos. Se sospecha que usa la magia para conseguir que crezcan y engorden más rápido. Asimismo, se rumorea que está haciendo sus incursiones en el mercado negro vendiendo carne de gul. Se declara a sí misma una gran fan de la obra de Howard y está obsesionada con que le venda la Mansión lo antes posible.
En la sala también se encuentra el mayordomo, que maneja los asuntos domésticos de la mansión con disciplina y gran eficiencia. Nada se escapa a su control. Tiene una cara extraña y una sonrisa que no parece humana. A su lado, permanece rígida la doncella, que tiene una mirada vacía y cumple su tarea con movimientos lentos y mecánicos. Su piel está cubierta de extrañas escamas. ¿será una enfermedad de la piel? Parece estar muy pez en lo que a esta cena se refiere.
Cualquier cosa puede suceder en esta extraña cena de Halloween... y todas malas, por supuesto...
Así comienza la partida de rol en vivo de Misterios de Arkham especial Halloween que preparé este sábado para los niños y unos amigos. Los investigadores se aplicaron estudiando las pistas que les llevarían a resolver el misterio y lucharon valientemente con seres rata, gules y otros horrores que moraban en las sombras de la mansión.
Mientras tanto, degustaban una cena consistente en pizzas ataud, quichés momia, fantasmicocos, cruasanes demoníacos y sangre con ojos de brujas... entre otras delicias que sumirían en la locura a más de uno y que a ellos les hizo perder algún que otro punto de cordura. Por cierto, que en la cuestión culinaria
Vidas Pixeladas me dio muchas ideas.
En un momento de la velada, una de las arañas se movió con grandes espasmos y dio un gran susto a todos los presentes. Incluso a mí, que sabía que había una araña teledirigida entre los adornos del escenario. Hubo a quien casi se le cae el vaso, a quien se le salieron los ojos de las órbitas y quien gritó de espanto, pero todo acabó en risas. La araña volvió a moverse en alguna otra ocasión, pero ya no tuvo el mismo efecto.
Finalmente, los investigadores se enfrentaron a un gran peligro que se escondía en lo más profundo de la mansión y lograron vencer al engendro del mal con las armas y hechizos que habían conseguido durante su investigación por la sala. Lo que no les salió tan bien fue la resolución del misterio. Sacaron un seis sobre diez y alguna pregunta la acertaron de chiripa, pero el caso es que se lo pasaron en grande y disfrutaron del juego tanto como yo dirigiéndolo. ¡Bravo por estos intrépidos investigadores que no dudan en mirar cara aa cara a los horrores más escalofriantes!
Misterios de Arkham es un juego de rol en vivo familiar ambientado en el universo Lovecraft que estoy desarrollando. Podéis leer sobre otras aventuras que hemos jugado aquí:
¡Ya llevamos unas cuantas!
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