Llevo ya casi un mes con contracciones dispersas, pero que cuando llegan vienen pisando fuerte. Normalmente me dan en la calle y cuando más prisa tengo. Sí señores, la ley de Murphy se cumple siempre en mi vida.
Ayer tenía que ir a hacerme un registro. Es decir, a que le hagan un electrocardiograma al corazón del niño. Así que me presenté en el hospital con unas contracciones subiditas y casi renqueando.
Me llamaron enseguida y me hicieron acostarme en una cama para conectarme a los monitores. Una vez sentada o tumbada me suele bajar el ritmo de los dolorcillos, así que me relajé tanto que casi me duermo. Me sacó de la ensoñación la enfermera preguntándome si me dolía. "Puueeesss no, no mucho" "Ajá" me contestó con tono monocorde y cara de póker. Ummm, que rayos significa eso. Nada, nada yo a lo mío.
Después de un rato veo que se van las dos chicas que habían entrado después de mí. Buf, que aburrimiento ¿por qué no me dejan que me vaya yo también? Ni idea, porque la enfermera se pasa a ver los monitores con su cara de poker, me agita la barriga, me recoloca los cachivaches y se vuelve a ir sin decir esta boca es mía.
Cuando ya pasaba demasiado tiempo para mí (mis riñones se quejaban a gritos de estar tanto tiempo en la misma postura) por fin se digna a dirigirme la palabra. Me manda a la sala de espera y me indica que me llamarán para que me vea la doctora porque tengo contraciones. "¡¡Pero no estaré de parto!! ¿Verdad?" "Si estuvieras de parto no estarías tan tranquila". Buena, respuesta. ¡Ale! A levantarme por fin de la cama y a esperar. Humpf, humpf. No va a ser tan fácil. "¡Vengaaaa! ¡Ánimo! Que ya casi lo consigues" canturreaba la enfermera. Menos ánimos y dame un empujoncito maldita. Pero nada no se la veía dispuesta a ayudarme, así que con un esfuerzo sobrehumano logré ponerme de pié. Llego a caerme y le muerdo un ojo.
Con toda la paciencia del mundo me senté de nuevo en la sala de espera. Esta vez tampoco tardaron nada en llamarme. Tocaba despatarrarse. Con lo poco que me gusta. Tras un momento tenso por mi parte la tocóloga llegó a la conclusión de que no estaba de parto, pero que tenía contracciones y estaba dilatando, así qué me iba a hacer una desagradable prueba y a casa. "¿Entonces me puedo poner de parto hoy mismo?" le pregunté ansiosa ."Puede" me contestó cautelosa. "Pero puede que no" insistí, "Puede que no". Estupendo. la mejor manera de no decirte nada. "¿Y puede que no para al niño en tres días?" "Pues por poder..." Vale, me queda claro, que Iván va a venir cuando le dé la gana.
Salí del hospital con más contracciones todavía. Uy que no llego a mi casita, que no llegoooo. Con estas perspectivas hay que actuar rápido. Mañana viene mi madre por fin, pero esta noche estamos sólos Raúl y yo ante el peligro. ¿Y si me pongo de parto? Habría que despertar a Daniel a la hora que sea para llevarlo con nosotros al hospital. Más vale prevenir que curar, así que marqué el número de la abuela Chari, que se prestó encantada, no sólo a tenerlo con ella esa noche, sino también a recogerlo en la guardería y cuidarlo esa tarde para que yo no hiciera esfuerzos. Se agradece en el alma. Ya me quedo mas tranquila. Aunque las contracciones siguen. Uf, que dolor.
Ya en casita me siento, me tumbo, me pongo de un lado, me pongo de otro. No hay manera, sigo igual. Empieza a ser preocupante, así que... a la ducha de cabeza para estar bien limpita por si acaso. Bueno, parece que el agua caliente sí que hace efecto. Los dolores bajan y el niño se ha debido dormir. Menos mal. De todas formas, me quedo más tranquila si Daniel duerme hoy con Chari. No vaya a ser...
Cómo son las cosas. Daniel fue chimpum pim pum "¡Aquí estoy!" E Iván parece que va avisando "Cuidado que voooy, que voooy". Sólo queda seguir esperando.
Cómo son las cosas. Daniel fue chimpum pim pum "¡Aquí estoy!" E Iván parece que va avisando "Cuidado que voooy, que voooy". Sólo queda seguir esperando.
AHHHHH!! que nerviossss.. como estas?? la pregunta es un poco tonta...la verdad pero todo el animo las buenas energias...toda eres la mejor....tu tranquila, respira...un besoooo
ResponderEliminarcuidate!!!!!
Pues fue una falsa alarma jeje. Sigo con las contracciones, pero cada mucho. Me parece que este se lo toma con calma. Pacieeencia. Gracias.
ResponderEliminarmadre miaaaa que nervios, leyendote me acuerdo yo tambien... estás tan pesada y cansada que sólo piensas que salga... pero cuando te lo ves venir...aaaay !!
ResponderEliminarPero bueno Iván tiene que salir, si o si, así que te deseo que si las contracciones vuelven pronto, que sea rapidito y leve !!!