jueves, 19 de noviembre de 2015

El niño nuevo

En cuanto Iván se siente contrariado carga contra mí: "Maldita mamá. Ya no te quiero. Mamá es tonta..." Y así hasta el infinito. Da igual si yo soy la verdadera culpable de su desazón o es otra persona. Él proyecta todas sus frustraciones sobre mi pobre persona. Esto prueba una vez más que la confianza da asco.

La mayoría de las veces me armo de paciencia e intento razonar con él, pero hay días que no me pilla muy católica y se acaba armando la de San Quintín. Uno de esos días, me harté de oir sus insultos y reproches injustificados y acabé gritando: "¡Vale! ¡Muy bien! Lo has conseguido. Si tan mala soy ya no soy tu madre, ni ésta tu familia, ni ésta tu casa. ¡Raul! ¡Raúl! ¿Que hace este niños aquí? !Hay un niño desconocido en nuestra habitación!".

Mi marido acudió corriendo con el mayor pisándole los talones y una gran sonrisa en la cara. "¡Un niño nuevo!" exclamó con voz emocionada, "¿Que hacemos con él Daniel?", se dirigió al nuestro primogénito. "¡Lo adoptamos!" contestó rápidamente el aludido. Mientras tanto Iván se había quedado mudo de la sorpresa y con los ojos como platos. "Ven niño nuevo" le invitó Daniel a seguirle, "Te voy a enseñar la casa". Desde lejos le oía decir: "Éste es nuestro gato. Se llama fantasma. Ésta es nuestra habitación. Aquí vas a dormir tú. Ahora te voy a enseñar lo mejor: la habitación de los juguetes..." E Iván trotaba tras él como un corderito.

Yo alucinaba con el giro tan raro que habían dado las circunstancias. No quise alargarlo más porque, al fin y al cabo, Iván sólo tiene cuatro años y quien sabe el cacao mental que se estaba formando en us cabeza con la tontería, así que fui al encuentro de los dos justo cuando su hermano mayor le preguntaba cómo quería que le llamáramos. "Ven aquí" le dije. El peque me miró preocupado. Me arrodillé a su altura, le cogí de los hombros, le miré fijamente a los ojos y le dije "Te llamas Iván". Juro que me pareció sentir cómo se relajaba y parecía bastante aliviado. "¡¡¡¿Cómo lo has sabido?!!!" exclamó Daniel siguiendo con el juego. Le expliqué que lo había leído en el fondo de sus ojos y le pedí que se acercara a mí. Mirando fijamente a sus pupilas le dije: "Y aquí pone que tienes algo que darme. una pequeña tapa que te has metido en la boca hace un rato. Algo peligrosísimo, como ya sabes, porque te puedes ahogar". Daniel se quedó boquiabierto y me entregó la tapa sin protestar. ¡Su madre leía la mente!

Lo cierto es que le había visto por el rabillo del ojo mientras le hacía el numerito a Iván. Pero los dejé impresionadísimos.

Al día siguiente, Iván me preguntó con voz bajita si yo quería un niño nuevo. Le dije que no. Que estaba encantada con mi Iván y mi Daniel, que, por cierto, ahora le ha dado por decir que se quiere llamar Rafa a secas, sin apellidos.

20 comentarios:

  1. Jaja, Dácil me reído a la vez que te felicito . Supiste dar un vuelco sorprendente a la situación y eso es muy efectivo. Los niños no son tontos,entienden, y demasiado bien . Hiciste lo correcto porque él ha obtenido un gran aprendizaje con ello ,estoy segura. No significa que todo va a cambiar de golpe pero sí que él va a reflexionar o lo va a recordar, lo cierto es que no debes callarte y dejarlo pasar . ¡Qué gracia el mayor! Entendió la situación y actúo propiciamente. Creo que será un recuerdo para él que le hará replantearse sus reacciones,a medida que crece.
    A mí me ha ido muy bien,el cambio de roles, cuando alguna vez me ha sucedido algo parecido: ya sabes, bueno ahora yo me tumbo o me pongo a jugar,y vosotros sois los padres y adopto la actitud "inadecuada" en ese caso y les exijo a ellos todas las labores que como norma me toca hacer a mí. No duran mucho,de inmediato me dicen:¡Sí mamá,no sabemos de dónde sacas pilas para seguir aún y cuando dormimos!. Además " amenazo" sin cena ,que estoy cansada y la hagan ellos,jajaja, rápidamente me vienen a hacer mimitos y masajes.

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    1. Muchas gracias Arahí, aunque no estoy tan orgullosa de mi hazaña. Sobre todo porque fue algo así como un "Hasta aquí hemos llegado". Supongo que algo aprendió en el momento, pero ya se le ha olvidado porque vuelve a las andadas snif snif.

      También intento lo del cambio de roles, pero mi hij mayor me viene con que yo soy la madre y que a eso no se puede renunciar. ¡Fastidiate! Y si les digo que hagan la cena el pequeño se pone como un loco histérico y, como me descuide, el mayor ya se me ha colado en la cocina eligiendo cuchillo. Necesito recargar paciencia ;)

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    2. Mándamelos para aquí arriba una semana, que una de dos, o te los pongo firmes o salgo loca,jaja, ¡No creo! Yo creo que son muy buenines y tú exageras,jajaja.

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    3. Jajaja Sí que son buenos. Y yo muy exagerada. Pero de verdad que hay días que los regalaba buuuuf

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  2. Es q a veces nos sacan de nuestras casillas...y se nos va la situación de las manos...

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    1. Totalmente de acuerdo. Y luego lo miras en frío y te arrepientes, pero como ya está hecho hay que seguir para adelante y ya. ¡Qué le vamos a hacer!

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  3. Jajajaja. Dicen que esa etapa del "te odio" es de lo más habitual. Creo que manejaste muy bien la situación. Besotes!!!

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    1. Muchas gracias!! Me temo que se me fue de las manos. Es cuerto que es una etapa normal, pero muy muy muy difícil de aguantar Sight!

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  4. ¡¡Un hermanito nuevo!! Hasta me he emocionado yo jajajaja....

    Espero que la mami desesperada solo lea las mentes de los niños traviesos... jajajaja... Me voy a liar la cabeza con papel de aluminio por si acaso jajaja.

    ¡Un muackiles!

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    1. Tranquila, mi única magia es que sé observar por el rabillo del ojo aunque esté haciendo otra cosa jajaja

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  5. Hola:pobre!! menudo susto se llevaría. La verdad es que reaccionó super bien aunque ahora quiera cambiarse el nombre. La verdad es que está en la etapa que tu serás la culpable de todo. Paciencia. Seguimos en contacto

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    1. No nos queda otra que tener paciencia. Que remedio!! Pero somos humanas y no siempre estamos acusamos igual el impacto de estos ataques. En fin, tendremos que aguantarnos mutuamente en esta etapa ;)

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  6. jajaja Rafita para los amigos? jejejeje
    te salen con cada cosa,... jejeje ¡me divierte!

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    1. Cada día una sopresa jajaja
      Aunque a veces los ahogaría sin ellos la vida sería taaan sosa ;)

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  7. Que bueno Dacil!! Lo que me he reido! Hay que ver el giro que puede dar una conversación con un niño, cuando nos sacan de nuestras casillas!! Y lo de Rafa??? que tios..XD

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    1. Sin es que no tenemos un día normal con estos peques jajaja
      Está visto que ser madre es tener sorpresas todos los días, a veces no muy agradables... Ainss

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  8. Que gracioso!!! me parto con este Iván, y diceque quiere llamarse Rafa?? jajaja

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    1. Lo dice Daniel. Es Daniel el que quiere llamarse Rafa. Si es que cada día una historia nueva jajaja
      Es lo que pasa cuando tienes dos bichillos con tanta imaginación en casa ;)

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  9. Jajajajajaja! Yo creo que si pruebo eso Peque se pira de casa, jajajaja!
    Genial!
    Ánimos campeona, por aquí ya sabes que andamos igual.
    Muas!

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    1. Hubo un día que le dije que le iba a llevar a un internado y se preparó el sólo la mochilita con calzoncillo, calcetines, pijama, pantalones... Flipé. Que narices tiene. Si no se fue de casa fue porque Raúl y Daniel hicieron de mi enfado un juego

      Mucho ánimo. Sobreviviremos a esta etapa!!!

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