viernes, 6 de noviembre de 2015

Una nueva aventura para los Hero Kids

El domingo, Raúl nos tenía preparada una emocionante partida a Hero Kids para Lagarto (Daniel), Hombre lobo (Iván) y Robin Hood (Mamá). La historia comienza con los tres protagonistas jugando en la orilla del río tan a gusto cuando de repente un cuervo se posa cerca y empieza a gritar: "Ayuda, ayuda. Mi amo está en peligro". Era el cuervo del mago, cuya torre se alza cruzando el lago.

Enseguida nos pusimos en camino para ayudarle. Decidimos que en barca llegaríamos antes que por el camino, pero, una vez en la laguna, unas extrañas criaturas marinas con la boca llena de dientes y largas colas salieron a nuestro encuentro. Entre los tres logramos abatirlas sin mucha dificultad y llegar a la torre. Raúl se había currado una maqueta chulísima que había comprado por internet con la idea de usarla en las partidas de rol con los niños. Los peques se quedaron fascinados con la construcción y tuvimos que andar con mucho ojo para que no acabara estrellada.

Desde el balcón se asomó unos segundos el mago, gritando: "Cuidado, se han vuelto locos" justo antes de que algo tirara de él hacia el interior. Sin perder el valor, la cuadrilla de Hero Kids se acercó a la puerta principal, que se abrió mágicamente. Nos encontramos en una habitación con muy pocos elementos. Sobre una alfombra descansaba un recipiente lleno de oro y joyas que nos llamó poderosamente la atención, pero Lagarto se fijó (gracias a un providencial seis en su dado) que la alfombra era sólo una ilusión y que el recipiente pendía de un enorme agujero que protegía el tesoro del mago de los codiciosos. Sin mirarlo dos veces subimos las escaleras y dimos a parar a otra habitación muy desordenada y con sillas tiradas por todos lados.

Cuando nuestros ojos se habituaron a la poca luz de la estancia distinguimos unas extrañas figuras humanoides hechas con cubos, escobas, trapos, palos... Enseguida comenzó una cruenta batalla en la que no tuvimos nada de suerte con los dados y acabamos con todas nuestras pócimas de curación y medio muertos. Pero el caso es que les vencimos.

El máster fue muy benévolo porque podía habernos machacado sin piedad y, en cambio, puso a la mitad de su ejército a barrer en vez de atacarnos porque eran unos seres mágicos que se habían vuelto locos y lo mismo te querían arrancar la cabeza como que buscaban la limpieza máxima del lugar. También se portó muy bien facilitándonos la búsqueda de una nueva botella de pócima de curación para cada uno. La íbamos a necesitar porque en el último piso encontramos al mago tumbado en una cama y custodiado por una armadura con vida propia y más bichos limpiadores asesinos.

En esta ocasión la fortuna no nos dio la espalda y logramos acabar con ellos sin tanta dificultad. El mago nos dio las gracias efusivamente y nos explicó que había creado esas criaturas para protegerse a él y a su tesoro, pero que se habían vuelto locas y lo habían tomado como prisionero.

Como premio nos dio más pociones curativas, porque los peques se empeñaron en que querían jugar también la vuelta para ver que sorpresas les aguardaban por el camino que no habían recorrido. Allí encontramos a los ¡hombres rana! Y también tocó luchar contra ellos. Menos mal que salimos victoriosos y por fin llegamos al pueblo dónde el sherif nos felicitó y nos invitó a una consumición gratis en la posada: zumo de melocotón para mí y batidos de vainilla para Hombre lobo y Lagarto.

¡Que gran aventura! Tanto les gustó a mis peques que esa misma tarde se inventaron las suyas propias. Daniel se dibujó unos personajes muy parecidos a los del juego del padre y me contó que tenía que ir a salvar a un niño que habían raptado de un pueblo y luchar contra muchos enemigos. Alucino con su facilidad para recordar cómo eran los malos de la aventura y dibujarlos con tanto detalle. Me costó llevar a cabo la misión con éxito, pero lo conseguí.

Entonces me llamó Iván para que jugara a su juego en el que unas cabras habían raptado a una tortuga y yo tenía que salvarla. Creo que él se inspiró en una cuento de la tablet donde hay un malo muy parecido a una cabra y le roba el espíritu a una tortuga. En sus juegos también me tocó tirar los dados para ver cómo me iba. Desde luego, los dos tienen madera de Máster.

17 comentarios:

  1. Q partida más chula!!!y los dados gigantes me han encantado. Besos

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    1. Raúl se partía porque cada vez que la pifiaba con os dados me mosqueaba jajaja
      Vaya ejemplo! Cómo se nota que los niños tiene más horas de juego que yo ;)
      Los dados fue un capricho de Raúl y han sido todo un éxito :D

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  2. Qué recuerdos de los libro juegos aquellos... Qué buenos ratos! Caaaacho dados! Jajajajaja y vaya aventura! Un beso

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    1. Yo nunca jugué al rol de peque, como mucho al elige tu propia aventura. Molaban :D
      Los dados se lo compró Raúl por internet porque le gustaron al primer vistazo. Y ahora triunfan entre grandes y pequeños jajaja

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  3. Coincido en que los dados son una pasada. Esos juegos me encantaban... Recuerdo que tenía el Hero Quest y menudo vicio. Jajajaja. Besotes!!!

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    1. Raúl también lo tenía... Corrección, aún lo tiene. Muy guardadito para que no caiga en las manos de las fieras jajaja

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  4. ¡Qué día más divertido! Jajajaja.... no ha faltado ningún detalle. Ahora entiendo de dónde le viene tanta imaginación a Daniel, si es que el papi la desborda y contagia...

    Por cierto... esas criaturas limpiadoras podrían pasarse una par de días a la semana por mi cueva jajaja...

    ¡Un muackiles!

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    1. Cuidadito que se vuelven locas, te cogen prisionera y luego tenemos que ir Hombre lobo, Lagarto y Robin Hood a rescatarte jajaja

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  5. Que emocionante!!! Me ha encantado la partida!!!

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  6. Yo nunca he jugado a juegos de rol pero papá Jirafa si, a ver si nos prepara alguna partida, je
    Me he tenido que reír con la cabra y la tortuga qué gracioso por favor!
    Estos peques tuyos ya mismo le preparan unas partidas al padre que lo van a dejar con la boca abierta ;-p

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    1. Pues os recomiendo HeroKids. Son aventuras muy chulas y se pueden adaptar a todas las edades :D

      A mí también me llamó la atención lo de las cabras secuestra tortugas jajaja

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  7. Qué chula la aventura. A ver cuándo me animo a hacer algo así con los enanos. Por ahora no hemos pasado del Pequeños Detectives de Monstruos :D
    Por cierto, Hero Kids está sólo en inglés, ¿no?

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    1. Es que pequeños monstruos da para mucho :D
      Sí, Herokids sólo está en inglés y mi marido dice que no tiene tiempo para traducirlo snif snif
      A ver si alguien se anima...

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    2. Al final no me he hecho con el Hero Kids, y en su lugar adapté la partida al Magissa :)
      http://namuras.blogspot.com.es/2016/09/jugando-magissa-con-los-peques.html
      Nos lo pasamos muy bien, por cierto :D

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    3. Genial la partida que te curraste y que salida más buena la de tu hija. Tenía toda la razón porque los ponis son encantadores jajaja Me alegro de que nuestra partida te inspirara. Muchas gracias!!

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