viernes, 27 de octubre de 2017

Nuestra pequeña mantícora

No sé muy bien cómo lo vi. Supongo que estaría riéndose como un loco, o llorando. Cualquiera de las opciones es posible porque abre mucho la noca y se tiene una panorámica interior estupenda. El caso es que me quedé helada. Pensé que había visto mal y muy seria la pedí que abriera la boca. Iván me devolvió la mirada y algo debió de notar en mi tono de voz porque me hizo caso (Aleluya. Milagro, milagro).

Y ahí estaba, un enorme incisivo que surgía donde no debía. Perfectamente alineado y en perpendicular a uno de sus hermanos gemelos. Ay Dios. Esto tiene que doler, pero el peque estaba tan pichi y aseguraba que ni se había enterado. Me hizo hacerle una foto emocionado. "¿Esto significa que por fin va a venir el Ratoncito Pérez?". "No lo sé", le respondí mientras marcaba el número del centro de salud para pedirle hora con el dentista.

No tardaron mucho en arrojarme un jarro de agua fría. No tenían hueco hasta una semana después. Pero esto era gravísimo. Le expliqué a la persona que me atendió el caso del niño y me sugirió que fuera por urgencias. Nos personamos en el centro y sólo tuve que enseñarle a la recepcionista el "problema" para que me diera vía libre hacia la consulta.

No tardaron nada en atenderle. El dentista es muy majo y enseguida se metió en el bolsillo a mi pequeño. Con un rápido vistazo dio por finalizado el chequeo, me miró fijamente a los ojos y me soltó "Vas a tener que confiar en mí". Ostrás y que otra cosa podía hacer. Yo no tengo idea de dientes.

Me aseguró que era algo de los más normal y que según  creciera el resto de los incisivos harían hueco al nuevo que tomaría su lugar en la fila sin problemas. De todas formas, como tenemos que llevar a los niños a revisión cada seis meses, iría viendo la evolución.

Muy agradecida y mucho más tranquila salí de la consulta con el enano pegando saltos.

A los pocos días, raúl detectó otro incisivo rebelde creciendo al lado de su compañero. Esto tenía pinta de no parar hasta que el peque luciera una inquietante doble fila. ¿Se estará transformando en una pequeña mantícora ante mis preocupados ojos?

8 comentarios:

  1. No te preocupes, yo conozco más casos como el de tu peque, pero en los 2 casos, el dentista les sacó a los peques los dientes de leche...

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    1. A mí me ha dicho que me espere. Como vamos a revisiones si hay que sacarlos me lo dirá más adelante... Supongo XS

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  2. Mi niño tiene uno asi arriba, le llamo dientes de tiburón jejeje Y no hay forma de que se le caiga! Al final terminara en el dentista.

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    1. Yo a este peque le haré seguimiento porque ya tiene dos dientes en la fila de dentro. Será normal, pero impresiona ainss

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  3. Alucinada me dejas!!! Por lo menos no le molesta y, si es algo común, pues ya se le solucionará. Besotes!!!

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    1. Eso espero!! Madre mía que bocados va a pegar la fiera con esa doble hilera de dientes ainsss

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  4. Al ver tú foto me has recordado a M, le pasó, le llamábamos tiburón, también fuimos al dentist y nos dijo qye tranquilos, los de delante cayeron y éstos volvieron a su posición normal. Un besito ;)

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    1. Que bien. Me dejas mucho más tranquila. Espero que a Iván le pase los mismo!!

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