martes, 29 de noviembre de 2022

Txano y Oscar: Un abrazo para Susi

Ya tenemos aquí el tomo número 11 de Txano y Oscar: Un abrazo para Susi. En esta ocasión se toca un tema muy de actualidad y muy candente, la Inteligencia Artificial. ¿A qué niño no le ha fascinado nunca la idea de tener un robot compañero que respondiera a los estímulos de la manera más humana posible? Pero a la vez es algo que da un poco de miedo por si se nos va de las manos. 

En la historia que tenemos entre manos se apuesta más por la ternura que por otra cosa, pero también juega con algunos momentos inquietantes llenos de misterio. Los gemelos y sus amigos viven una nueva aventura en un entorno de robótica muy interesante. Sobre todo porque hace alusiones a la actualidad, aunque, no olvidemos que lo hace dentro de un mundo imaginado en el que existen superpoderes, magia, aliens, fantasmas, animales que se comunican por telepatía... ¡y lo que nos quede por descubrir! Aquí puede pasar de todo.

En esta ocasión, Óscar seguirá liándola con sus actos impulsivos, Txano seguirá intentando comprender todo lo que ocurre a su alrededor y Sara-Li pasará a un segundo plano. Aunque no se olvidan de ella, no se va a ahondar en su historia, pero es que ya tenemos suficiente con toda la carga emocional y contenidos éticos que se nos plantean, aunque superficialmente, porque es una lectura orientada a niños y para ellos prima la aventura y las situaciones alucinantes. Aun así, no está de más hacerles pensar un poco. Cuando acaben este tomo seguro que se plantean muchas cosas en las que ni habían caído al imaginarse a su robot ideal.

Por supuesto, todos los amigos de la panda ponen su granito de arena, pero además conoceremos nuevos personajes y volverán a aparecer otros sobre los que ya leímos en aventuras anteriores.

Otra cosa que me ha encantado son las alusiones a robots que se están desarrollando en la actualidad y a otros que viven en nuestra fantasía, concretamente a los protagonistas de Wall-E (menudo peliculón). Y aunque no lo nombran específicamente, yo no pude evitar recordar con mucho cariño al entrañable Nº 5 de Cortocircuito (Otro peliculón).

La verdad es que este nuevo tomo de Txano y Óscar da pie a montar una de esas veladas temáticas que a mí tanto me gustan y que incluyen libro, actividad, peli y lo que se tercie. 

Huelga decir que las expresivas ilustraciones de Patricia Pérez complementan a la perfección este nuevo texto de Julio Santos. De hecho, creo que se supera al plasmar robots con tanto detalle y convertirlos en simpáticos personajes.

Estoy deseando conocer el tema sobre el que girará el próximo tomo de Txano y Óscar. Me encanta esta serie y es genial que tengamos nueva entrega cada seis meses.

lunes, 21 de noviembre de 2022

Mágicas Navidades de Torrejón 2022

Las Mágicas Navidades de Torrejón ya han abierto sus puertas y este año vienen más cargadas de ilusión y diversión que nunca. Ya solo dar un paseo por las instalaciones te sumerge en un mundo de fantasía llena de luz y color que te transporta directamente al mismísimo centro del espíritu navideño. Aunque ya os advierto que es imposible resistir a tantas tentaciones y sólo disfrutar del paseo.

Nada más entrar nos encontramos con la entrañable casa de la Navidad, epicentro de todos los sueños infantiles. Aquí se hospedará el simpático Papa Noel hasta el 25 de diciembre y los sabios Reyes Magos hasta el 6 de enero para escuchar a los protagonistas de la Navidad por qué han sido muy buenos todo el año y se merecen recibir sus ansiados regalos. 

Unos elfos que estaban preparando la llegada de Santa Claus nos saludaron alegremente. Iván se escondió en mi espalda porque es un poco grinch, pero el resto de los niños disfrutaron mucho con estos simpáticos personajes. 

Un poco más allá el camino se llena de famosos super héroes en todos los formatos y tamaños. Aquí los fans de Marvel van a flipar en colores. Y si eres más de ir a galaxias muy muy lejanas sólo tienes que meterte en los iglúes para ver a tus personajes favoritos de la saga galáctica.

En cuanto se va el sol, las estrellas comienzan a brillar con intensidad. Las del bosque de estrellas porque las de verdad es imposible verlas con tanta luz como desprende el poblado navideño. La decoración, la niebla artificial y un espectáculo en el que literalmente te bañan con haces de luz hacen de este lugar una pasada. 

Muy cerca encontramos la senda de los animales luminosos que también brilla en todo su esplendor llenando nuestras retinas de traviesos monos, coloridas mariposas, preciosas libélulas y muchos otros animales impresionantes... Entre ellos un T-rex, el que más suele triunfar entre los niños. Aunque este año le ha salido un gracioso competidor: el panda rojo. Se ve que la película de Red sigue en el subconsciente de los más pequeños.

Este año han puesto un Belén enorme y chulísimo con figuras tamaño real. ¡Una pasada! Y unas Meninas navideñas muy graciosas. Eso tampoco lo habíamos visto otros años.

Por supuesto, los Guachis no faltaron a la cita y vinieron a darnos la bienvenida. Son la imagen de este recinto navideño tan emblemático. Fue muy emocionante ver la alegría con que los recibían los más pequeños.

Durante todo el paseo encontramos atracciones de feria y puesto de juegos para intentar ganar tu peluche de premio, pero es en la zona de Navidad Aventura donde encontramos las más emocionantes y una noria enorme para verlo todo desde una altura considerable. 

Para Iván fue de las mejores cosas del recinto. Sobre todo, la casa de la risa, que es la más enorme e infernal en la que he tenido la "fortuna" de entrar. Curiosamente, tienen truquitos para que los sufridos padres no fenezcamos en el intento. ¡Cómo se agradece! Iván estaba entusiasmado con el recorrido lleno de trampas. Si fuera por él se habría pasado todo el rato dando vueltas y más vueltas esquivando, intentando mantener el equilibrio y partiéndose de risa.



Como fuimos a la visita de medios de comunicación nos invitaron a ver una muestra del espectáculo de magia de Los 3 Reyes Magos, que nos dejó a todos con la boca abierta y aplaudiendo a rabiar. La historia va de una niña que vive de la mano de una narradora celestial el relato de cómo Melchor, Gaspar y Baltasar llegaron a Belén, todo repleto de impresionantes números de magia.

También nos dejaron acceder a Ice Festival, el primer concurso internacional de figuras de hielo en España, y nos pareció una pasada. Es algo que no se ve todos los días y que impresiona por la textura y brillos del material en que está hecho, a la vez que da un puntito de pena al saber que son obras efímeras, como las que se hacen con arena. Los detalles, las composiciones y la originalidad de las obras hacen que te den ganas de quedarte allí horas y horas para no perderte absolutamente ni un pliegue congelado de las estatuas. 

Si fuera jurado no sabría cuál escoger. Aunque Iván tiene clarísimo que se quedaría con el trono helado, pero para llevárselo a casa. Seguramente porque era la única escultura que se podía tocar... ¡ y en la que te dejaban sentarte!



Para terminar nuestro recorrido a lo grande disfrutamos del espectáculo de la puerta mágica, que se ha modernizado muchísimo con el paso del tiempo. Se trata de una pantalla led multicolor en la que se proyectan imágenes alucinantes y un pasillo de arcos ornamentales con un total de un millón de bombillas led. 

Además, hay dos pases: el clásico de villancicos navideño de toda la vida y, como novedad, uno de música más moderna para bailar y darlo todo. Nosotros pudimos ver ambos y es difícil elegir. Aunque Iván tiene claro que prefiere el moderno. Lo dicho, este hijo mío tiene espíritu navideño para lo que quiere.

Como broche final, cenamos en Bavarian Christmas una cena alemana buenísima en un ambiente muy alegre y animado. Nos fuimos únicamente porque el mayor estaba solo en casa "sufriendo" y ya habíamos alargado la experiencia más de los previsto. ¡Es que nos lo estábamos pasando genial! El pobre Daniel no había podido venir porque el plan le había pillado en plenos exámenes y encima, justo ese día, le habían frito a deberes. A pesar de disfrutar de la casa para él sólo, que para eso es un adolescente de 13 años, se quedó muy rascado por no poder venir, así que tenemos que reservar otro día para volver y que él también lo disfrute.

Las entradas cuestan entre dos y tres euros, aunque los días de la familia (23 y 30 de noviembre y 14 y 21 de diciembre) es gratuita y los visitantes tienen descuentos en espectáculos, atracciones y hotelería. La venta de entradas se hace a través de la web y si se adquiere alguna de las exposiciones o espectáculos la del recinto ya va incluida.

















sábado, 19 de noviembre de 2022

¿Cuestión de género o de sexo? Buscando el equilibro

 

- ¡¡¡Estoy hasta las narices del LGTBIQ+!!! - Entró gritando Daniel un día a la vuelta del instituto.

- Pero Daniel, ¿qué tonterías dices?- le espeté yo muy sorprendida.

- Llámame homófobo si quieres, pero es que ya me tienen quemado - volvió a quejarse aún más vehementemente.

- Pero, pero, pero... ¿qué te ha pasado?

- Que, ahora, de repente. Todos en mi clase son bisexuales y si yo digo que no lo soy... "Ooooooh qué poco respeto, qué poco toleraaaante". ¡Pero es que no lo soy! ¡Qué culpa tengo! - se quejó muy enfadado.

- Vale, tranquilo. En eso te doy la razón. Hay que respetar a todo el mundo y ellos no lo están haciendo contigo. - concedo.

- Pero es que eso no es lo peor - continuó muy exaltado-. Hoy una niña nos ha montado un pollo tremendo porque quería entrar al baño de los chicos y los chicos no queríamos porque ¡era muy incómodo hacer pis con ella allí! Se ha puesto a gritarnos que ella se sentía chico y que éramos lo peor. Tuvo que venir una profesora a sacarla de ahí.

- ¿Y qué pasó? - inquirí alucinando con los conflictos actuales de los adolescentes.

- Pues que la niña se puso a llorar y a gritar que la iba a denunciar.

- ¿Y qué hizo al profesora? - seguí tirándole de la lengua.

- Nada. ¡Si es que no podía hacer nada! Qué va a hacer. Pues intentó consolarla un poco y luego se fue porque empezaban las clases. Pero, a ver mamá, ¿lo de los baños no debería ser cuestión de sexo y no de género?

- Pues no lo sé. Es que nunca me lo había planteado.

- Es que yo hacer pis delante de niñas no quiero...

- Ya, ya... lo entiendo - Y más si tenemos en cuenta que el chiquillo sólo tiene 13 años y la vergüenza en alza. 

La verdad es que no sé muy bien qué es lo correcto o quién tiene razón en este caso. Qué difícil es alcanzar el consenso y el equilibrio y más a estas edades en las que hay tanta confusión e inseguridad.

miércoles, 16 de noviembre de 2022

Los regalos de Navidad

Fuente: Mamá la repera

De nuevo llegan Papa Noel y los reyes Magos y toca romperse la cabeza para dar con los regalos perfectos. En el caso de los niños es que es tanta la acumulación que se convierte en algo ridículo, sobre todo a menos de tres meses de sus cumpleaños, de los que ya han salido cargaditos.

Porque... vamos a ver... si sumamos lo que trae el abuelillo de rojo con lo que traen los de oriente por parte de la gente de la familia que les regala habitualmente da una burrada de cosas nuevas. Si encima tenemos que sumar lo nuestro ya nos salimos con los regalos.

Los años anteriores han recibido detallitos en Papa Noel y hemos buscado intereses comunes para buscar el gran regalo colectivo de los cuatro, que llegaba en Reyes: la impresora 3D, las Oculus, el carnet de parques reunidos... Pero este año no se nos ocurre nada y ellos no ayudan.

Así que se me ocurrió una idea un poco arriesgada. Llevaban mucho tiempo pidiéndome una cosa que ya habíamos llegado a la conclusión que no funcionaba del todo bien y los adultos lo habíamos descartado. Es un sistema de vales por los que ellos pueden pedir más turno de videojuegos, youtube, actividades extra, una comida especial, una actividad extra... El problema es que la pedían siempre en el peor momento o cuando no cuadraba o, ¡peor! Cuando estaban castigados. Y claro, todo se vuelve más difícil y confuso. 

Normalmente les organizaba un juego gimcana por Navidad (calendario de adviento habitualmente) y verano para que se los ganaran y los gastaran durante las vacaciones, pero los muy cucos se los guardaban para "mejores" ocasiones. El caso es que, en vista del abuso y mal uso, el padre me dijo que se acababan los vales en esta casa y yo estuve de acuerdo

Cuando le propuse el posible plan navideño a Raúl puso mala cara, precisamente por esto que os estoy contando. Él pensaba que se había librado para siempre de las sonrisas ladinas de los niños enarbolando un vale para hacer realidad algo que en ese momento no tocaba o no cuadraba. Pero, en seguida se le ocurrió una mejora muy interesante.

Les podemos regalar 12 vales genéricos, uno por cada mes, así recibirán los regalos distribuidos por todo el año: 6 vales por Papa Noel y 6 vales por Reyes. Cada mes pueden pedir algo, pero la decisión última de concedérsela la tendremos los padres, que los conocemos. Así evitamos abusos (o por lo menos lo intentamos, que estos son peor que el abogado del diablo). Les hemos dicho que pueden elegir entre muchas cosas: un micropago (sin pasarse), un videojuego, un cómic o libro, una actividad que quieran hacer, comer un día fuera, ir al cine... Incluso pedir que ese mes haya un tiempo x más de turnos de pantallas o algún derecho que les solamos negar de entrada como ir escuchando su música en el coche con los auriculares. 

Voy a explicar esto último: en los viajes en coche vamos eligiendo por turnos una canción cada uno o vamos escuchando relatos cortos de terror (que les gusta mucho a los niños), pero Daniel lleva un tiempo queriendo desconectarse de todos escuchando su música en un dispositivo propio. A mí eso me parece un horror que le aísla de la familia. Así que me he negado en redondo, pero si lo pide un mes, vale mediante, estaría dispuesta a concedérselo como regalo navideño.

En resumen: en vez de mil juguetes, entre los que les regalan abuelas, tíos y padres; estamos pensando que en casa nos lleguen a todos los vales de Enero a Junio el 25 de diciembre y de Julio a diciembre el 6 de enero. Eso sí, todo adornadito, en plan bonito y eso. A ver qué se me ocurre. Así podemos hacer uso de ellos durante todo el año, el gasto navideño se reparte y los niños no queman todos sus cartuchos en dos noches. ¿Creéis que funcionará o que serán unas navidades tristes? Por ahora los niños están de acuerdo con el plan (no nos hemos atrevido a hacerlos sorpresa por si acaso había río de lágrimas).

El único problema que le veo a este plan es cómo presentar los vales para que el salón no se vea poco navideño las mañanas más mágicas del año y que la escenografía no me vaya a costar un ojo de la cara y sea peor el remedio que la enfermedad. ¿Alguna idea?

Por cierto, mirad que talonarios de "vale por" más chulos he encontrado el blog de Mamá la repera :)

martes, 15 de noviembre de 2022

La copa envenenada

Muy ilusionada había hecho un pequeño juego para animar la cena de Halloween que quería celebrar con una amiga y su hijo, pero al final nos fuimos a Covarrubias durante la noche en la que los espíritus salen a pasear y no pudimos jugarlo, así que lo dejamos para más adelante.

Y la ocasión llegó. La cena de Halloween se convirtió en una comida de Acción de Gracias porque nos apetecía probar recetas típicas de esa festividad y me llevé el juego.

La cosa no salió como estaba pensada porque acabamos hasta arriba de la comida y no nos cabía ni un sorbo de nada, así que decidimos jugar primero una larga partida a la expansión de Detectives "Sigue la pista" y luego al de las copas. 

Por cierto, nos moló un montón el caso de Detectives. Mientras desentrañábamos quién era el culpable de qué y por qué con mi amiga y Raúl en el juego de tablero, dos de mis futuros jugadores para La copa envenenada se cansaron de esperarnos y de jugar por la casa y se fueron a dar una vuelta, con lo que, cuando llegó el momento de dar con el veneno, ¡no estaban! Nos faltaban dos jugadores.

Aún así, decidimos seguir adelante con el plan porque no sabíamos cuál sería la siguiente vez que nos juntaríamos. Coloqué seis copas que me facilitó mi amiga con una bebida de fresa sin gas, porque leí que el gas y la sal no se llevaban bien y la bebida envenenada iba bien salada para que la pudieran distinguir al primer sorbo. Eso fue uno de los elementos más divertidos del juego porque la gente bebía con miedito.

Para que todas las copas se vieran iguales, le puse la sal a la bebida en una copa y luego la pasé a la copa definitiva para que no hubiera sin un mínimo rastro que les pudiera dar la pista.

Decidimos que mi amiga y Raúl elegirían las copas de los niños ausentes, Iván sólo bebería de una y yo de la última copa que quedara sin elegir porque ya me sé la solución del juego. Por cierto, ¡me tocó la envenenada! Y yo lo sabía, así que me tocó disimular mientras bebía. Lo gracioso es que todos habían puesto caras raras al beber, así que habían despistado muchísimo.

En realidad, tenía un montón de modos de juego desarrollados porque había pedido ayuda para testearlo en twitter y la verdad es que se presentaron un montón de voluntarios que me ayudaron muchísimo. Lo que pasa es que salieron también muchas mejoras que no eran compatibles entre sí, así que acabé por desarrollar cinco formas diferentes para jugar.

Nosotros jugamos a una muy sencilla. Los jugadores eligen por mayoría la carta de personaje que quieren leer (excepto la del señor Rosa que se lee la última obligatoriamente porque es la que tiene más pistas). Con la información de cada carta pueden decidir elegir una copa que beber tras presentar una teoría de por qué creen que no está envenenada y (disimulando si es la envenenada para que nadie se dé cuenta) deja la copa delante suyo. De esa ya nadie más puede beber. Si eliges beber antes, tienes más copas entre las que elegir, pero menos pistas que seguir y si decides beber más tarde, tendrás menos copas entre las que elegir, pero más pistas. Hay personajes que  es bastante evidente que no tiene la copa envenenada, así que si eres rápido no te llevarás la bebida salada. Eso sí, si bebes de la copa envenenada, "morirás", pero tendrás una pista buenísima para sacar el misterio final porque ya sabrás a quién se quiere envenenar. Te faltará el por qué.

Los dos adultos se lo pasaron muy bien sacando las pistas y estrujándose las neuronas para saber la solución, pero al peque lo perdimos en cuanto leímos todas las cartas y se eligieron todas las copas que era lo que le parecía divertido. Lo de pensar la solución le pareció muy complicado porque se había hecho un lío con la telaraña de relaciones. Por un momento pensé que me había pasado con la dificultad, pero mi amiga lo resolvió sin dudar. ¡Y lo clavó! Se ve que es de esas cosas que o lo ves o no lo ves.

Lo importante es que pasamos un buen rato y nos divertimos mucho, que para eso lo había hecho.

Con tanto juego y comida se nos hizo tardísimo y nos fuimos de ahí a la hora de la cena, listos para ver una peli despancharrados en el sofá y terminar el día relajadamente.

Por si a alguien le apetece jugarlo aquí lo dejo para su descarga.

Agradecimientos (perfiles de twitter): @pelenchu @virgsanmar @MarchHa45462745 @fjporcel @J_rechola @Elrond3 @Thomas41541743 @magrat80 @PaznmP @SoniadelFaces @Auri_Dreams @LithianDr @el_cornetin @kellypch @gaxpode @PAHfotografia @_cmw_ @JuegoTintura @itortv

lunes, 14 de noviembre de 2022

El día de Acción de Gracias

 

¡Aclaremos! No hemos celebrado el día de Acción de Gracias que ni nos va ni nos viene ni sabemos la tradición que guarda detrás, pero sí que teníamos pendiente una cena temática de las que solemos celebrar con una amiga desde hace tiempo. Ya hemos tenido mexicana, oriental, alemana, hindú... Y en esta ocasión nos pareció muy al hilo americana, concretamente los platos tradicionales de Acción de Gracias, ya que la fecha de su celebración en EEUU está muy cerca (24 de noviembre).

Tocaba en casa de mi amiga así que ella se encargó del plato principal, pavo relleno, y yo del postre. En principio iba a ser tarta de calabaza (la preferida de las fieras), pero me encapriché en hacer también de manzana (de mi preferidas). También leí que era muy típico el cóctel sunrise, que es facilísimo de hacer: zumo de naranja, granadina y tequila. Nosotros los hicimos virgin y pasamos del tequila porque no le iba a dar más salida y comprar una botella entera para unos chorritos no merecía la pena. Además, como habían menores mejor sin alcohol.

Mi amiga tuvo problemas para encontrar el pavo porque por aquí cocinar pavos enteros no se estila, así que acabó agenciándose dos pollos rellenos alucinantes. Estaban que te mueres. Y la salsa que hizo... ¡te chupabas los dedos! Tan bueno estaba que me hinché a lo pavo (valga el juego de palabras) y luego no me podía ni mover. ¡Que hasta tuve que desabrocharme el botón del pantalón.


Es que también probé las dos tartas, acompañadas de helado de vainilla, tal y como decía en la receta de la tarta de manzana. Menudo banquete. 

Las recetas de las tartas las busqué en una página que rezaba: Postres típicos de Acción de Gracias. Justo lo que yo quería. El problema es que llegado el momento descubrí que estaba fatal redactada. De hecho, había ingrediente que te pedía que luego nunca se añadían en la explicación del proceso. Total, que tuve que improvisar. Menos mal que salieron aparentes y gustaron. Yo no apostaba un duro por ellas. La de manzana llevaba un glaseado que di ya por perdido y lo hice por otra receta. Me quedó rarísimo, pero estaba bueno, que es lo importante. A los niños les encantó.

Mi amiga aportó también una ensalada riquísima. Lo dicho, casi estallamos de tanto comer.

Durante la comida comentamos el origen de esas fiestas, pero nadie lo tenía muy claro. Entre todos y basándonos en lo que habíamos visto en series y pelis  norteamericanas dedujimos que era algo así como que para animar a los británicos a ir a América les prometieron tierras fértiles. Después de un viaje terrible con muchos desastres, carencias, peligros, enfermedades, etc... los colonos llegaron a la "tierra prometida" y lo primer que comieron todos ellos, casualmente, fue un pedazo de pavo relleno delicioso, porque ellos lo vale. Durante la comida dieron gracias por haber logrado llegar a SUS tierras, que en realidad ya eran de otros, pero no tardaron en resolver ese pequeño inconveniente al estilo tradicional: con sangre y barbarie.

Esta explicación no tiene base histórica porque no nos hemos molestado en investigarla. Simplemente fuimos tirando de hilos de lo que sabíamos gracias a los productos audiovisuales consumidos que hablaban sobre el tema. Así que no nos hacemos responsables de su fidelidad histórica. Sólo queríamos pasar un buen rato.

Después de comer, recogimos todo (más mi amiga que nadie, la verdad) y nos dispusimos a jugar a "Sigue la pista", expansión de "Detectives", mientras los niños huían de las garritas del gatito de la casa, que es una monería muy traviesa.

El juego nos gustó mucho porque sigue la mecánica del juego base, pero introduce el tema de que estamos a finales de los años 70, con lo que no contamos con internet y hay cosas que hay que consultarlas en la biblioteca o en una base de datos con fondo negro y letras verdes (a mí me entró nostalgia y todo).

Más de tres horas después resolvíamos el misterio con gran éxito. En ese tiempo, los niños se habían aburrido del gatito y se había dispersado. Los dos mayores se habían ido a dar una vuelta y el pequeño se había enganchado a la Switch. Algo que al minino no le había hecho ni la más mínima gracia, con lo que invirtió muchos esfuerzos en recuperar la atención del pequeño humano, aunque fuera a zarpazos.

Yo había llevado el juego que me inventé para Halloween de "La copa envenenada", porque no habíamos podido jugarlo la noche más terrorífica del año. Y empezaba a temerme que tampoco podríamos en esa ocasión, pero los adultos estuvieron más que dispuestos a jugar aunque tuvieran que elegir las copas de los dos niños ausentes. Como transcurrió el tema os lo cuento en otro post que éste se alarga demasiado ;)

viernes, 11 de noviembre de 2022

Reyes contra Santa, risas y mucha caña

La peli de las navidades ya tiene título: Reyes contra Santa. Desde que Coca cola lanzó al estrellato a la figura de San Nicolás con el nombre artístico, entrañable y pegadizo de Santa Claus, Los tres sabios y bondadosos Reyes Magos han dio perdiendo terreno en las ilusiones infantiles. Y esto no es ficción. Es la realidad. 

Los niños españoles hace ya mucho que envían su carta al gordo de la barba roja esperando sus regalos al inicio de las vacaciones y no cuando ya hay que volver a retomar las clases. Pues ya tenemos aquí la película que todos estábamos esperando con la batalla entre seres míticos más épica, pero eso sólo es el inicio, porque la Navidad está llene de seres fantásticos de todo pelo, orígenes y leyendas, que no se van a quedar atrás estas fiestas. Sobre todo el que encarna lo más tenebroso y terrible de este tiempo de amor y alegría.

De hecho, una de las cosas que más nos ha gustado ha sido el toque tenebroso... mezclado con música cañera navideña y risas a la española. Los niños salieron encantados del pase y eso que habíamos llegado con lluvia de regañinas por mal comportamiento en el trayecto. Pero se nos pasó el enfado con cada escena y cada risa.

También me ha calado el mensaje principal, porque muchas veces perdemos de vista lo más importante de la Navidad. Que si los regalos, que si el espíritu, que si las reuniones familiares... pero en estas fiestas hay unos claros protagonistas y me parece un regalazo llevarles una tarde al cine a pasar un rato muy divertido con el irascible Melchor, el olvidado Gaspar, el inteligente Baltasar y el idiota más carismático: el espectacular Santa.

Tampoco podemos olvidar los elfos macarras y la eficiente paje, unos secundarios con mucha personalidad y muchas cosas que decir en esta batalla que acaba transcendiendo y volviéndose tan peligrosa como para acabar con el espíritu navideña. ¡Ahí es nada!

Tras la película nos pegamos todo el camino de regreso a casa comentándola. Los tres teníamos claro que para niños muy pequeños e impresionables no es, aunque a ellos no les dio ni un poco de inquietud, pero sí les encantaron las escenas más graciosas y cuando los protagonistas pierden los papeles. Para ellos eso último fue lo mejor, incluso por encima del apoteósico final. Curiosa la mente de mis fieras...

Se estrena el 18 de noviembre, unas fechas ideales para empezando a alimentar el ambiente navideño.

martes, 8 de noviembre de 2022

Gato viral. Juego de mesa de Iván

Iván se ha inventado un juego de mesa sobre gatos (qué raro), cuyo objetivo es hacer tantas travesuras como podamos para conseguir puntos XD sin perder una de nuestras vidas gatunas en el intento. Gato Viral lo ha llamado, aunque no sé muy bien por qué ese nombre. El caso es que me ha parecido bastante gracioso aunque aún le quedan muchos aspectos que pulir.

Para comenzar la misión felina cada jugador elige un personaje con sus características y habilidades diferentes. A unos se les dará mejor conseguir puntos XD, a otros atacar, a otros encantar para quitarse de encima los puntos de enfado del dueño que penalizan bastante, etc... Además cada gato cuenta con diferente número de cartas en su baza inicial, porque este juego va de manejo de cartas y tablero, aunque yo lo del tablero lo quitaría porque creo que dificulta mucho las interacciones de pelea.


En un principio había que recorrer muchas habitaciones para llegar a meterle un tímido zarpazo a tu contrincante, eso requería demasiado gasto de acciones que no invertía en conseguir puntos XD o más cartas, lo que hacía que se te llenara la mano de cartas de combate y defensa que no valían para nada. Encima estaba el factor dueño que se iba moviendo por la casa y si te veía liándola aumentaba el enfado.

No convencí a Iván para que quitara el tablero, pero sí redujo las casillas a tres. En vez de por habitaciones te movías por zonas y así era más fácil toparte con tu enemigo (o enemigos si juegas más de dos). Ahí sí que volaron los zarpazos, las defensas, los contraataques... 


La mecánica consiste en que cada jugador puede hacer dos acciones por turnos que puede ser moverse a la zona contigua, usar una carta (travesura, mimo, ataque, defensa...) o robar carta del mazo.

Mola porque hay dos formas de ganar: o llegando a un número pactado de puntos XD (nosotros pactamos 10, pero se llegaba enseguida así que lo subimos a 15) o quitando todos los puntos de vida al contrario. Ojito que no sólo pierdes vida con los ataques. El nivel de enfado va subiendo con cada travesura y cada nivel tiene sus consecuencias. Perder puntos de vida es una de ellas. De hecho, yo perdí dos veces por eso.

Las partidas son cortas, rápidas y llenas de risas y piques divertidos. Si algún día le da por mejorarlo y escribir las reglas lo comparto porque a mí me ha hecho gracia y a lo mejor a vosotros también. pero no apostéis por ello. Como comentaba el otro día con un amigo: una cosa es tener una buena idea y otra muy distinta invertir el tiempo y esfuerzo necesario para desarrollarla.