Después del palizón que nos pegamos en las TdN, con tantas cosas para hacer y tan poco tiempo de dormir, llegamos a Covarrubias agotados. Habíamos hecho planes para hacer excursiones y tal, pero desde el principio nos apoltronamos en el pueblo y nos tomamos la vida con calma. Ni Raúl quería conducir, ni yo madrugar, ni los niños hacer otra cosa que jugar con sus amigos del pueblo. Así que ¡para qué forzar las cosas!
Con el río, los paseos y un poco de senderismo por caminos cercanos ya teníamos más que suficiente. Hasta las bicis sacamos para que los peques las disfrutaran, una actividad que no solemos hacer mucho en Madrid por falta de tiempo y ganas. Siempre, en algún momento de la operación bicicleta, me toca a mí cargar con alguna y ¡claro! Si no me lo piden expresamente yo no doy ideas por la cuenta que me trae. Pero en el pueblo es otra cosa. Hay que tener cuidado con los coches, pero incluso me puedo sentar tranquilamente mientras ellos van calle arriba y calle abajo por la Solana.
En uno de los paseos por el campo nos dedicamos a recoger pequeñas piedras blancas que pensábamos convertir en calaveritas. ¡Se prestaban mucho por la forma! Pero al final se han venido para Madrid tan blancas como fueron. ¡Si es que estos fieras querían estar todo el rato o fuera o jugando a juegos de mesa!
Así que ya hemos estrenado y requetestrenado ROX, Picnic y The Forest, además de darle caña a otros que llevamos con nosotros y que triunfaron también entre los amigos de los niños.
La última noche que pasamos allí, unos amigos nos invitaron a cenar en el patio de su casa mientras los niños se tomaban una pizza y salchichas viendo la tele con un proyector y una sábana blanca en plan cine de verano. Fliparon y no hubo niños en toda la velada. Cuando iba a ver cómo estaban me los encontraba con la mirada fija en la pantalla y masticando chuches tan atentos. Según el mayor, ¡la mejor noche de su vida! jajajaja
Fue una semana de descansar de verdad, que ya nos hacía falta.
Planes que molan si señor, a veces salen mejor sin preparar verdad?
ResponderEliminarQue razón tienes. A veces las cosas son como van surgiendo :D
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