¿Que hacemos cuando tenemos dos niños y diferentes horarios lectivos con un margen de tan sólo una hora? Lo obvio es llevar a Iván la parque de al lado del colegio mientras Daniel disfruta (o no, nunca lo sabremos) de su extraescolar.
Nunca, jamás, lo llevaremos a casa. Porque a la hora de salir a buscar al hermano estará inmerso en una actividad entretenidísima e interesantísima y tendremos perreta segura.
Con buen tiempo, no hay problema: juegos, paseos, charlas subrrrealistas...
Pero, ¡ay amigos! Llegaron las lluvias. ¿Y ahora que hago yo? Pues embutirle en las botas de agua y el anorak, facilitarle una paraguas rezando para que no le saque un ojo a nadie y dejarlo saltar a la manera Peppa Pig que tanto se ha extendido entre los niños españoles. Mucho me temo que el resfriado anda cerca, pero es que la opción de la perreta no me atraía nada. ¡Ya tenemos bastantes a lo largo del día!
Así que le deje jugar y mojarse, aunque mucho menos de lo que yo esperaba. Ahora la temperatura es muy amable. Si los grados hubieran sido algunos menos, ya nos hubiéramos sido tan magnánimas.
Al principio, la cosa fue bien porque hasta salió el sol y parecía que la tormenta se había alejado, pero, de repente, volvió a abrirse el cielo y a llover como si no hubiera mañana. El peque se cubrió la cabeza con su paraguas y yo hice lo mismo con el de su hermano. Evidentemente, era demasiado pequeño para mí y me vi en apuros. A Iván parecía que tampoco le ivan bien las cosas. Tras permanecer parados unos minutos sin atrevernos a movernos me soltó "Mamiiiii, me toi mojandoooooo". Así que corrimos a la puerta del colegio y llamamos al timbre buscando asilo. Como son muy majos nos abrieron y nos refugiamos en una zona con techito.
Allí Iván se puso a jugar al escondite conmigo. La idea era que a uno le tocaba buscar y al otro esconderse detrás de su paraguas. Fue divertido hasta que llegó la primera madre conocida. Entonces le entro un ataque repentino de celos y boicotéo todo intento de conversación con el que se atreviera a acercarse.
Menos mal que Daniel tardó poco en salir y pude irme a casa a ponernos a resguardo.
¡A ver que hacemos cuando llegue el invierno!
El invierno es un royo con niños! No puedes hacer prácticamente nada... a ver si encontráis algún lugar donde pasar esa horita ;)
ResponderEliminarSeguro que se nos ocurra algo ;)
EliminarGracias!!
Pues sí...menudo panorama...una hora no es nada, pero en la calle con frio es demasiado tiempo!! tantea al cole...igual te dejan quedarte en la biblioteca del cole con el peque leyendo un cuento...
ResponderEliminarBuen finde!
Preguntaré, aunque la biblioteca está cerrada por organización de la misma.
EliminarY en las normas pone que durante las extraescolares los padres no pueden permaneces en el cole.
Aún así, a lo mejor se apidan.
Buena idea!! Muchas gracias
La lluvia es una faena... Vamos, sé que es necesaria pero no me cae nada simpática. Jajajaja. Besotes!!!
ResponderEliminarPara mí es una molestia, pero mis hijos están encantados con ella. Es cuestión de perspectiva ;)
EliminarHoy se levantaron contentísimos y pidiéndome las botas de agua :D
mmmm difícil cosa. Todo depende de en que zona esté el cole porque si hubiese un centro comercial (lo odio pero con niños y en lluvias...) o galería cerca sería una opción pero claro, todos los días... O que habiliten un gimnasio cubierto en el cole para esos casos o que se quede en casa con su padre (si se puede) o... no sé que más decirte ajajaja
ResponderEliminarSuerte!
Pues sí que hay un centro comercial cerca, pero volvemos a las mismas, entre que vamos y volvemos podemos sumar una media hora a paso Iván y arrancarle de sus amados coches no me iba a ser muy fácil :S
EliminarDe todas formas era una idea excelente. Gracias!!
O comprale un traje de agua que usan los escandinavos y luego en la calle llueva, nieve o lo que sea. Bueno y otro para ti claro jajajaj
ResponderEliminarTendré que buscarnos uno para cada uno... ¡a juego! jajaja
EliminarÍbamos a estar monísimos ;)
Estoy temiendo el mal tiempo, porque Peques es outdoor total... Ainnnnnssss...
ResponderEliminarMuas!
Pues botas de agua y un buen abrigo chubasquero, que me parece lo vais a necesitar!!!
EliminarÁnimo!!
Con lo dos no tengo problemas, porque me los llevo a casa, les hago una actividad, o jugamos a contrucciones, pintamos... Eso también les gusta. El problema es meter a un niño en casa y convencerle luego para sacarlo a buscar a su hermano. Sight!
Vaya hora mas larga... Jejeje.
ResponderEliminarNo te imaginas jajaja
Eliminar¡Que me vas a decir a mí ! Eso me lo conozco , aunque yo no tenía ese problema , porque aquí las distancias son cortas para todo( alguna ventaja de vivir en una ciudad pequeña ) y los míos no me daban problemas en entrar y salir a buscar al otro . Llévate un juego de mesa ,que te puedas tirar o sentar en una escalera o en cualquier lugar , y se entretenga el niño.
ResponderEliminarQué buena idea!! Buscaremos un soportal cerca e intentaré entretenerlo de esa manera. Muchas gracias!!
EliminarAins si es que el invierno y lo sniños son incompatibles, que faena tener horarios ta distintos porque así no hay manera de organizarse.
ResponderEliminarYa te digo!!! Y necesidades distintas Buf buf!!
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