miércoles, 2 de marzo de 2022

Recreación histórica de la I Guerra Mundial

Como ya dije en el post anterior, tuvimos la suerte de coincidir con la celebración de una recreación histórica de la I Guerra Mundial, aunque no la pudimos disfrutar todo lo que nos hubiera gustado porque el tiempo no acompañaba. Hasta algo de granizo cayó. ¡Con la de días soleados que llevamos!

Aún así los recreacionistas se lo curraron muchísimo y nos hicieron vivir una experiencia fascinante. Estoy deseando acudir a mucho más eventos como éste.

Hay que aclarar que no se trata de visitas teatralizadas, ni espectáculos de interpretación. No son actores, son expertos en historia que disfrutan reconstruyendo retazos del devenir de la humanidad, mostrarlo y explicarlo a quien tenga interés. Me parece muy interesante y participativo. Una forma increíble para aprender sobre este tema de una forma totalmente inmersiva y divertida.

En el mismo castillo montaron un hospital de campaña al que no le faltaba detalle. Lleno de entregadas enfermeras que atendían a los heridos que iban llegando desde las trincheras, situadas a unos metros de distancia. 

En el patio central del castillo podíamos ver el instrumental y recursos con los que contaban y preguntarles todo lo que alimentara nuestra curiosidad. 

Uno de los recreacionistas, vestido como el ejército francés, nos informó que a las 12 tenían programado una ataque con gas al bando alemán, así que a la hora D nos acercamos a las trincheras para ser testigos del evento. 

Allí encontramos las trincheras aliadas y alemanas y a los soldados trabajando en alambradas, parapetos y estructuras varias.

Aunque comenzó a jarrear como si no hubiera mañana, las tropas aliadas no se echaron atrás. Desplegaron la incursión tal y como estaba planeada. Uno de los recreacionistas nos explicó que los primeros ataques con gases fueron con cloro y que la primera vez que lo usaron cambió la dirección del viento y los que acabaron gaseados fueron los atacantes. Desde ese momento el gas se tiraba a la trinchera enemiga con obuses para evitar este tipo de accidentes.

Los franceses tiraron las bombas de gas a lugares específicos obligando a los alemanes a ponerse sus máscaras de gas a toda prisa. Aún así, no les quedó más remedio que rendirse y fueron apresados y trasladados al hospital para ser atendidos. 

La idea inicial era llevar a los heridos en una carro tirado por un caballo, pero el mal tiempo lo hizo imposible, así que tuvieron que llegar a pata por un camino lleno de barro y escoltados por los aliados.

Una vez allí los atendieron como pudieron teniendo en cuenta los recursos con los que contaban.

Sabemos que también tenían programada una escaramuza por la tarde, pero nos la perdimos porque fuimos a la vista guiada del parque de Trebuchet Park. No se puede estar en todo desgraciadamente.



























4 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Sí, nos pareció curiosísimo y una forma muy chula de aprender sobre este momento de la historia :)

      Eliminar
  2. Uau, que pasada! Me encantaría ver algo así. Donde era?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En el Castillo de Belmonte, en Cuenca. Una pasada!!!
      Pero sólo fue ese finde. S me entero de otra te digo. Creo que los recreacionistas están haciendo siempre cositas porque el otro día me enteré tarde de otra en un museo de Madrid. A ver si estoy más atenta

      Eliminar

Me encanta saber lo que piensas.