Comienzan las vacaciones de los peques y hay que organizarse. Como la mami está en paro lo lógico, natural y lo más deseable es que se queden en casa y nos olvidemos de extradivertidos campamentos de verano, tan necesarios para la conciliación, pero que tan poco gustan a mis retoños. Ellos encantados de disfrutar de mami al cien por cien. Pero mami... ¡mami es sólo una persona! ¿Habéis intentado jugar con dos niños a dos juegos diferentes a la vez? Cada uno te grita en una oreja convencidísimo de que estás entendiendo cada una de sus palabras. Y como no reacciones como quieren ya la tenemos montada. Cuando intento ponerlos de acuerdo para jugar a lo mismo... No falla... a los cinco minutos: ¡pelea segura! Si les saco los juguetes: o eligen cada uno uno diferente y esperan ansioso que te sumes a su juego y no al del hermano... O se encaprichan del mismo y luchan por él hasta las últimas consecuencias, aunque hayan dos iguales. Solución: ¡todos a la calle! Parque, piscina, plaza... ¡dónde sea! Aunque salir de casa no me asegura que no vayan a discutir cada cinco minutos. "Mamiiiiii, Aniel no me dejaaaaa", "Mamiiiiii, Iván me ha quitado el paloooooo"... ¡¡¡¡Aaaaarrg!!!
Y eso no es todo. Mami no está en esta vida sólo para servir y adorar a sus retoños. Es que, además, ¡hay una casa que mantener! y un trabajo, esperándome en algún lugar, que hay que buscar. Es imposible concentrarse en una tarea si te están llamando... ¡cada cinco minutos!
Por otro lado, empiezo a pensar que tienen un plan diabólico para volverme loca y que se ponen de acuerdo ¡para no ponerse de acuerdo en nada! Si uno quiere ir al parque, el otro quiere ver la tele. Si uno quiere la piscina pequeña del polideportivo, el otro la grande. Si uno quiere rojo, el otro verde. Y así todo el día. Aunque me he puesto dura y dejo poco espacio a la elección (por mucho que argumente y debata los pros y los contras de todas las opciones, ellos se encabezonan irracionalmente como buenos niños pequeños que son) el problema es que siempre tengo de perreta a uno de los dos.
Y si encima contamos con que mi paciencia suele ser limitada, el resultado es una olla a presión que a ratos chilla y se desespera y a ratos se siente muy culpable y besa y abraza a sus chiquitines hasta que estos huyen agobiados.
Pero no es todo malo. Eso sería mentir como una bellaca. Tenemos momentos muy dulces, muy bonitos, muy tiernos y muy divertidos. Jugamos, bailamos, reímos, pintamos, nos bañamos, charlamos... Y cuando los meto en sus camitas. Felices y agotados. Toca enfrentarse con todo lo que dejé a medias para atender a sus demandas o que olvidé acabar para correr a solventar sus disputas.
Estoy segura que esto es la "aclimatación" a las vacaciones y que pronto nos haremos con la nueva rutina. Y todo irá rodado. A mí a optimista me gana pocos jajaja
Te leia y parecia que reflejabas mi dia a dia. Solo que yo encima trabajo 6 dias a la semana. Ayer por ejrmplo tuve mi dia li re y hubo momentos que aunque suene muy triste, preferia estar trabajando. No se si aguantaria todo el verano asi. No seria bueno para mi ni para mis "angelitos". Me salva que la semana que viene estan aqui mis suegros para todo el verano.....La verdad que uso mis momentos de bloger para cambiar el chip y evadirme del dia a dia. Un beso y paciencia que es lo unico que nos queda.
ResponderEliminarNo suena triste. Suena realista. Ya lo he oído más veces... ¡de mis labios sin ir más lejos! El caso es que esto debe ser el pan nuestro de cada día, así que, quitando que me van a salir más canas, el resto me lo tomo con filosofía. Y afortunadamente, por ahora, soy capaz de apartar el mal humor y el enfado de hace un minuto en pro de la armonía madre e hijos y disfrutar de las pequeñas alegrías, aunque vayan rodeadas de situaciones conflictivas. Por el lado de mis peques, siento decir que están acostumbrados a mis explosiones y no le dan más importancia que a una regañina suave. Uy uy como me enrollo.
EliminarComo me alegro de que tus suegros te echen una mano. Se necesitan todas las que se puedan reunir jajaja
¿Y mi comentario?
ResponderEliminarAinsss... q se ha borrado todo :D
Aaay!! A mí también me ha pasado. Y suele borrarse cuando más largo lo escribo. ¡Que rabia me da!
EliminarMadre mía, qué paciencia... Lo dicho, las madres tenéis el cielo ganado. Tiene que ser porque los buenos momentos compensan los malos. Un besote!!!
ResponderEliminarSí que los compensan. En eso tienes toda la razón :D
EliminarUi que paciencia madre mia. Bueno disfruta de los momentos más dulces ;)
ResponderEliminarGracias!!! Eso intento. El problema es que al tener dos parece que se turnan para portarse mal :S
EliminarY cuanto más amor, ¡peor se portan! Hasta que no les doy el grito... Que rabia. Menos mal que las reconciliaciones son muy bonitas. Madre e hijos abrazados jajaja
Ya no te pude volver a comenta.r
ResponderEliminarSiento q estés en paro de nuevo.
Lo q te decía... ¿Has pensado, ya q a tu mayor le encantan las manualidades? crear una especie de calendario donde venga la foto o nombre cada día de uno de ellos?
Ese día, quien salga en la foto es quien decide a donde ir.
y así al día siguiente decidirá el hermano.
;D
Muchas gracias. A ver si remedio lo del paro, pero me temo que las cosas están gris oscuro, tirando a negro... Sight! Que te voy a contar!
EliminarLo del calendario es una idea genial, pero me da miedo darles tanto poder. Si fuera por ellos estarían todo el día en casa con tele o tablet. Me cuesta un mundo sacarles de casa... Y un mundo volver a meterles. A lo único que no hacen ascos es a la piscina. La nombro y ya los tengo en la puerta jajaja
Si yo ya me vuelvo majara con uno... Peor me gusta tu toque optimista, jejejeje... ¡ánimos!
ResponderEliminarY por cierto, veo enorme a tu peque, madre mía qué estirón está pegando...
Muas!
El optimismo es lo único que nos queda jajaja
EliminarIván está enoooorme. Ya es muy mayor. dentro de poco me alcanzan estos dos. Aunque ya te digo que n se tiene que esforzar mucho porque soy talla mini jajajaja
Cuanto más te leía más miedo me da lanzarme a la aventura de la maternidad.
ResponderEliminarCuando mi marido vuelva a preguntarme que a qué vamos a esperar para ser padres lo voy a poner a leer tu blog ¡igual se lo replantea! jajajaja
Besos, Cuca
http://losdulcessecretosdecuca.blogspot.com.es/
Noooooo. no te quedes con lo malo jajaja
EliminarCada niño es un mundo y seguro que a ti te salen angelitos ;)
Deja de leer mis blog ahora mismo!!!!! Es contraproducente...
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ResponderEliminarAnimo Dacil!!! Entiendo perfectamente lo que estas pasando..yo cuando no llora uno es el.otro,.cuando uno se duerme el.otro se.despierta y asi sucesivamente elevado a infinito!! Y tb me pregunto si es q lo hacen para volverme.completamente loca!!!
ResponderEliminarPero luego, los ves reirse, y jugar juntos y todo compensa. Un besote.
Tienes toda la razón!!! Luego compensa, pero el día que tiene torcido es infernal para nosotras. Y ahora que estoy 24 horas al día con ellos noto que mi paciencia es un bien muy escaso ¡y me siento fatal por gritarles así! No entiendo que me desobedezcan sistemáticamente y que me tenga que doler la garganta cada noche. Pero es verdad que se ríen tanto y te dan tantos besos que también es una alegría. Ay!! Que difícil!!!!
EliminarMuchas gracias!!!
Pues sí, mejor ser optimista! me encanta ese sentimiento de culpa cuando te das cuenta deq ue solo son niños yq ue no entiende mas que de juegos, que les hagas caso y ya está. Y vlaro tu a veces estallas, pero luego vuelves corriendo a besarlos.........
ResponderEliminarSi yo les adoro y eso lo saben ellos, pero tiene que ver cmo me pongo cuando estallo. ¡Como un fiera! Y cómo tensan ellos la cuerda. Buf buf. Es agotador. Menos mal que todo acaba en sentidos abrazos. Al menos por ahora...
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