Al día siguiente ya lo tenía en la mano y fantaseaba feliz con lo que le traería el ratoncito Pérez.
El gracioso personaje infantil le trajo un euro y dos chupa chups, que compartió galantemente con su hermano. Con el dinero se compró dos zomblings (unos bichos que venden en los kioscos a 50 céntimos cada uno) y también los compartió. Y es que Daniel es todo un caballero.
Cómo se nota que se está haciendo mayor mi niño.
Yo recuerdo que cada vez que se me movía un diente no paraba hasta quitarlo. Era una salvaje. Jajajaja. Besotes!!!
ResponderEliminarYo igual jajaja
EliminarLo retorcía hasta que el pobre se rendía y se caía.
Y Daniel ha hecho lo mismo no creas
No paró hasta que se le cayó. Que ilusión!
:) q ilusión el Ratoncito!!!!!! para el próximo le dais recuerdos míos jejeje y a Daniel hay q felicitarle por lo bueno q es compartiendo con su hermano ¡q bien!
ResponderEliminarSí que hace ilusión. Para el próximo le dejaremos una nota que ponga: recuerdos de parte de Animal. A ver si por las amistades cae otro euro de propina jajaja
Eliminar:D ¡genial!
EliminarPues ya se le mueve otro!!!!!
Eliminar¡Qué encanto! Encima el Ratoncito Pérez trajo un regalito especial para su hermano: compartir... jijijiji...
ResponderEliminar¡Un muackiles!
Es que en esta casa llevamos lo de compartir hasta el extremo. A veces me pregunto si no nos estamos pasando... :S
EliminarQue ilusion hacia, es bonito revivir esos recuerdos tan dulces con tus hijos, que por cierto que generoso jajja :). Bss
ResponderEliminarSí que hace ilusión :D
EliminarY yo supongo que él piensa que cuando se le caigan los dientes a su hermano hará lo mismo por él jejejeje
Visión de futuro ;)
Vaya, ha sido un visto y no visto :-o
ResponderEliminarMe alegro que lo haya vivido con tanta ilusión, qué etapas tan bonitas todas las de nuestros peques, verdad?
Síiii. Cuando nos enseñó el diente estaba casi caído. Yo veo mucho trabajo para que se caiga más rápido por parte del peque jajaja
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