La promoción de Kinder chocolate,basada en regalar actividades extraescolares con sus productos, es todo un acierto. Primero disfrutas de la golosina, que encantan a los niños y a los mayores, y, encima, puedes llevar a tu hijo a probar una clase de lo que más le guste gratis: idiomas, deportes, música o arte. Actívate con Kinder Chocolate, se llama, y es verdad que te activas, porque además de moverte y disfrutar con tu hijo de algo diferente, el chocolate recarga tus energías. Lo sé, porque me comí yo casi todos los Kinder Bueno.
La oferta es tanta que me costó muchísimo elegir. Al final me decanté por una clase de arte a la que podía llevar a los dos a la vez y en la que dejaban participar a los padres. Se daba en el centro Gymboree, un centro muy agradable en el que se imparten clases en inglés de música y arte a niños pequeños.
Nada más entrar por la puerta, los peques descubrieron el paraíso: el gimnasio para bebés. Un lugar lleno de colchonetas, circuitos, pelotas, rulos... ¡Vamos! Que ganas me daban a mi de ponerme a brincar también.
Para su disgusto, los alejé de la sala mágica para conducirlos a su clase. Se portaron realmente mal. Era viernes, y los viernes son los días que salen del cole agotados e hiperactivos. No paraban de correr, saltar y caerse. Los otros niños se comportaban como verdaderos angelitos y el contraste era demasiado grande. Así que yo no paraba de reñirles y sentarlos en el cómodo sofá ¡castigados! Las monitoras sonreían a cada diablura de los enanos. Una de ellas, incluso se reía abiertamente, pero yo sufría por el espectáculo que estaban dando.
Comenzó la clase y enseguida se puso de manifiesto el nivel cero patatero de inglés que tiene mis retoños: ¡No se enteraban de nada! Menos mal que las palabras importantes las repetían en español. El tema de ese día era: ¡las abejas!
Lo primero que hicieron las profes, fue animar a la clase a pintar un mural con pincel grueso y pintura hecha de miel amarilla y naranja. ¡Con lo que les gusta! Estampaban pintura con tanto entusiasmo que, de vez en cuando, les caía algo a ellos también. Hubo que aclarar a Daniel que la pintura no era comestible, aunque tampoco tóxica.
Tras el mural, les repartieron folios y les animaron a pintar abejitas con los dedos. Luego les dieron cola y trocitos de papel pinocho para que hicieran sus obras maestras, siempre al hilo del tema principal. Cuando terminaron, les presentaron un bidón forrado de papel: ¡la abeja reina! La pobre no tenía color, pero los peques podían solucionar el problema a base de esponjitas y pintura. ¡Hay que ver el entusiasmo que ponían!
De vez en cuando, me tocaba discutir con los niños para que no se quitaran el baby o no se escaparan de la clase, pero siempre volvían en cuanto se enteraban de la siguiente actividad.
La última creo que fue la que más les gustó. Quitaron la tapa a una mesita de plástico y debajo tenían un montón de plastilina amarilla con una textura rarísima. Disfrutaron muchísimo modelando, machacando, desmigajando... Cuando taparon de nuevo la mesa se oyeron muchas protestas. Y por fin, llegó el momento que estaban esperando ansiosamente: ¡El gimnasio infantil!
Para los que están matriculados es gratis, pero nosotros lo pagamos aparte. Valió la pena porque era un lugar genial y extremadamente divertido.
El pobre Daniel se fue del centro con dos chichones porque su comportamiento atolondrado y descuidado siempre le pasa factura a base de tortazos imprevistos.
Cuando íbamos de camino al metro, los dos me pidieron volver al centro para asistir a su clase de música en otra ocasión. ¡Parece que les gustó la experiencia!
Que buena idea lo de Kinder y que guay la actividad :)
ResponderEliminarLa verdad que lo del gimnasio aunque hubiera que pagarlo tiene muy buena pintas
Saludos
Era imposible no entrar en ese gimnasio. Si no suelto las pelas les da un algo a los pobres jajaja
EliminarLa verdad es que me ha parecido una gran iniciativa la de Kinder. Y veo que tus chicos se lo pasaron genial aunque la hayan liado parda. Jajaja. Besotes!!!
ResponderEliminarEs de las mejores que he oído. Ayudas a los peques a probar cosas nuevas a ver si les gusta :D
EliminarCreo que me estoy acostumbrando a que me la líen parda... snif snif
Es verdad ,no recordaba esta promoción , que he visto la publicidad.
ResponderEliminar¡Qué bien! Hay infinidad de centros que hacen todo tipo de actividades para niños.
Me temo que mis chicos no son mucho de ir a extraescolares. Son más de estar con su mami. Seguramente debido a su edad y carácter. Es probable que en un par de año pasen de mi y prefieran a su grupo de amigos del futbol o algo parecido. ¡Hay que aprovechar al máximo este momento! jejeje
EliminarSiendo así... me apunto a comerme los kinder bueno... mmmm que ricosss jejejee, se les ve disfrutar como nadie.
ResponderEliminarBesotes.
Fue un promoción de Madresfera en la que nos mandaban dos cajas de ocho kinder chocolate y sendas actividades extraescolares ¡y me comí casi todos yo! Es que estaban de viciooooo!!!
EliminarTe puedes creer que todavía no he ido a la clase de natación con la bichito?? Si esa que era al lado de tu casa....entre pitos y flautas!!! A ver si llamo otra vez. Los tuyos se lo pasaron pipa, buscare la actividad
ResponderEliminarTe creo porque a mí me pasó una cosa parecida. Se fueron pasando los días, se fueron pasando los días...
EliminarEsta actividad está fenomenal. Te la recomiendo 100%