miércoles, 24 de septiembre de 2014

Iván es un pieza

Corrí del edificio de los mayores con Daniel pisándome los talones al de los pequeños para recoger a Iván. En la escalera estaba mi peque sentado y estirando bine el cuello, buscándome con la mirada. En cuanto me vió se le iluminaron los ojos y me regaló su sonrisa más radiante.

Si pensaba que su profesora me lo iba a entregar sin más estaba muy equivocada. En cuanto la vi con la chaqueta del peque en la mano me olí que tocaba conversación serie. Y así fue.

"¡Vaya elemento es Iván!" Fue lo primero que me soltó, "No escucha, no hace caso, no sigue las instrucciones... Iván dile por qué tengo yo la chaqueta" A modo de respuesta el chiquitín le lanzó una patada desganada a su "seño". Roja de la vergüenza y la ira le espeté una airado "¡Castigado!", e intenté sentarlo en las escaleras, pero el niño tenía el día rebelde y enseguida se levantó.

"Tengo yo la chaqueta porque la tira al suelo... Y el baby también..." Tierra trágame, pensé yo. Daniel, en un momento de distracción se plantó entre las dos y comenzó a defender a su hermano a capa y espada.

"Es que sólo tiene ¡tres aaaaaaños! Sólo tres aaaaños. Y las profesoras tenéis que enseñaaaaarles porque es un bebé" le explicaba a la docente. "Pues explícame cómo lo hago" le soltó divertida al hermano mayor. "¡No lo séeeeee" Exclamó Daniel como diciendo "Eso es cosa tuya".

Volviendo al tema, me explicó que tenía que hablarle muy despacio y mirándole a la cara. También debía procurar que el chiquillo hablara despacio y pronunciando bien. Además de hacerles juegos que fomenten su capacidad de atención. Le expliqué que estábamos en plena etapa de los pulsos y me aseguró que no tenía nada nuevo que contarle, que eso de ella sabía mucho. Con la franja de edad de la que se ocupa no me extraña.

Lo cierto, es que fue un encanto. Y me lo explicó todo muy suave y amablemente. Yo ya sé que mi Iván de cara de angelito, en realidad, es una energúmeno con mucha mala uva. Seguiremos trabajando en su cabezonería, atención y mal carácter.

18 comentarios:

  1. Ay!! Que complicado es a veces que los peques aprendan lo que está bien y lo que no...
    no hay una forma fácil.
    Paciencia y ánimo.

    Y me ha encantado leer como su hermano mayor lo defendía.

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    1. No hay fórmulas mágicas, no. Nosotras lo sabemos bien con nuestros bichillos preciosos ;)

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  2. hola encontre tu blog por casualidad y me a gustado mucho
    decirte que Ivan no es un pieza solo un niño de 3 años que aun le queda mucho por aprender seguro que cuando cumpla un par de años mas comprendera mejor las cosas
    y un ole por su hermano por defenderle asi

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    1. Hola!!! Muchas gracias por tu consejo. Creo que tienes toda la razón en que su comportamiento es el normal para su edad. El problemas más bien debe estar en mis niveles de paciencia. después de casi tres meses de verano con las fieras necesito recargar ;)

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  3. Ay, este Iván... Jajajajaja. Paciencia, guapa!!! Un besote.

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    1. Vamos a tener que hacer un intercambio de fieras: Tu te llevas a Iván y yo a Forlan jajaja

      Es broma!!! Yo saldría perdiendo porque seguro que me espabila a mis gordos peludos y luego me hacen gatunerías todo el día ;)

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  4. Bufff, pues sí q empiezas bien el curso :-( ... lo mejor la defensa de su hermano mayor.
    Para tí...paciencia y ánimo, a ver si tienes suerte con la profe y no le cuelgan el cartelito de "niño malo".

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    1. Es que Daniel es un cielo. Lo que pasa es que es tan nervioso que la gente lo tacha de "Bicho" sin pararse a ver más allá.

      Espero que no le cuelguen a Iván ese san benito de "niño malo". Por lo que he oído, la profe ha hablado con más madres con el mismo tema. Es que el verano los asalvaja!!!

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  5. Paciencia, sólo tiene tres años, dale tiempo,... En unos meses seguro que puedes razonar mejor con él.
    Me encanta la reacción de Daniel. Es absolutamente genial y está cargadísima de razón. Qué bonito es.
    Besos!

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    1. A mí es que se me cae la baba con Daniel cuando sale en defensa de su hermano. No es la primera vez. Me encanta cuando castigo al pequeño y el mayor empieza a soltarme: "¡Mamá! ¿No te das cuenta de que es sólo un bebé? " Jajaja me parto...

      A ver si entre el cole y la rutina, metemos algo de sentido común en el cabecita loca del pequeño. ¡Seguro que sí!

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  6. Con todo lo que crispan los nervios, con todo loq e te hacen pensar, con toda la culpabilidad de la que sin querer te inundas... Con todas nuestras impresionantes buenas intenciones de que querer hacer lo mejor, siempre lo mejor, porque les queremos, porque la palabra clave es AMOR, y el amor nos lleva a interrogarnos, y el amor nos lleva a desesperarnos y el amor nos lleva a escribir hasta un blog... con todo el arsenal de recursos muy bien aprendidos, otros adquiridos, otros improvisados, todos seguramente perfectos, al final, Dácil, no hay fórmulas (ójala las hubiera,), no hay recetas (ojala pudieran prescribirse en la farmacia), lo único, y es la verdad, la verdad verdadera verdad, que tienes ante tus hijos y que lo único que ellos automáticamente perciben sin necesidad de interpretación es que LES QUIERES MUCHÍSIMO, MUCHÍSIMO, MUCHÍSIMO.
    No voy a darte un consejo, solo te voy a recordar el mensaje que mandas al mundo con un blog como este: UNA MADRE QUE NO AMA A SUS HIJOS Y NO QUIERE LO MEJOR PARA ELLOS, NO SE DESESPERA.
    Tranqui, hagas lo que hagas, los sentimientos que te mueven es lo único que tus niños aprenderán de tí.
    Inés

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    1. Ay Inés, muchísimas gracias. No sabes que bien me han venido tus palabras. Que comentario más bonito y lleno de mensaje. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Lo único que importa es el amor a tus hijos.

      Muchos besos

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  7. Madre mía! Cómo te entiendo, lo único que mi bichito no ha cumplido todavía los dos y ya no podemos con el, de hecho hoy estaba tan desesperada que en mi blog tb he escrito sobre el tema! Sólo nos queda una cosa, paciencia, mucho amor y ser firmes!!! Mucha suerte!!

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    1. Ya me he pasado por tu blog. Buf que trabajo tienes con le pequeño. Mis dos peques empezaron también muy pronto con los pulsos. Cuando pares deberían regalarte toneladas de paciencia en vez de muestras de toallitas y papillas...

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  8. Tienes que tener paciencia , que poco a poco con tu ejemplo y tu hacer diario , lograrás que él vaya por el buen camino . Hablar mucho con él , pero tampoco conversaciones largas que aburren a los niños , ideas cortas y concretas . No hay fórmulas mágicas , pero tampoco se puede dejar sin más sin hacer nada , porque pasan los años , esa actitud se instala y entonces ya es tarde para cambiar . Sin peleas , tocar las fibras más sensibles de su alma será siempre resultante de algo efectivo , aunque es peque todavía . Y cuidado con el hermano mayor , aunque es gracioso , no es bueno que le apañe y le tape , debe predominar siempre la verdad , y ser crítico cuando sea necesario y protegerle cuando así lo necesite.
    Sin prisa pero sin pausa , tampoco te asustes , está aprendiendo las reglas y las normas , pero con respeto y amor , se consigue.

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    1. Muchas gracias por tus consejos. Siempre me vienen muy bien. Tendremos conversaciones cortas, directasy concisas, porque la atención de este chiquitín es muy difícil de mantener aún.

      Tendremos cuidado con Daniel, Aunque así como lo defiende lo ataca. Es la típica relación amor odio. Ese día ¡a capa y espada! Otro día le dará la razón ala profe en que Iván es un bichillo. Depende del día....

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  9. Bueeeeeno, no sé de que me suena! Por aquí tenemos también a un individuo con cara de angelito y bichillo total... pero bueno, paciencia, poco a poco mejorará la cosa! (esperoooooo!)
    Muas!

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    1. Jajaja Si es que son niños y ¡nosotras sus madres! Así que ellos a seguir liándola y nosotras a seguir riñendo. Debe ser casi una ley de vida ;)

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