Siempre que vamos a Gran Canaria mis niños se emocionan porque van a ver a Natalia, su prima canariona. Y el sentimiento es mutuo porque hay que ver lo mucho que se divierten juntos. Su primita mayor les cuida y les atiende siempre con una gran sonrisa. Le cuenta cuentos, juega con ellos y les sigue mucho la corriente. Y, claro, a mis fieras les encanta estar con ella.
Este verano hemos quedado muchísimo con ella y su padre para gran alegría de los niños. Da gusto verlos juntos y a sus cosas. A pesar de vivir tan lejos y de la diferencia de edad están muy unidos.
"Que pena que Natalia no viva en madrid, ¿verdad mami?", me soltó el mayor un día justo después de llevarse un pequeño susto por parte de la abuela Matilde. Mi madre había asegurado muy seria que ese verano la hija de mi hermano no vendría a su casa. Se refería a que no vendría a quedarse porque sus padres estuvieran trabajando como otros años, pero el peque se quedó blanco pensando que no la vería. Enseguida le saqué de su error y alivié su pena.
Afortunadamente nos vimos mucho y fuimos juntos a parques, a la playa, de paseo, a cenar... Lo pasaron genial juntos.
Qué guay que se lleven tan bien!! Me alegro de que hayan podido disfrutar de su compañía. Un besote!!!
ResponderEliminarYo también me alegro, También eso de vivir tan lejos hace que se cojan con ganas jajaja
EliminarLo mejor de todo es que pueden disfrutarse los primos a pesar de la distancia o diferencias de edad. No todo el mundo tiene esa suerte, así que es un tesoro ;-)
ResponderEliminarSí que lo es. Estos están encantados con su primita canariona :D
EliminarOhhh como nos sorprenden siempre los niños, que sentimientos tan bonitos que a pesar de la distancia y de que no se vean muchos se tengan ese cariño y se lleven tan bien. Un besito preciosa.
ResponderEliminarSí. Me encanta ver lo bien que se llevan :D
Eliminarq bien! vaya sobri-prima guapa y simpática :D
ResponderEliminarSíiii. Es majísima la chiquilla :D
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