Si algo les sobra a mis churumbeles es imaginación así que les fue extremadamente fácil ponerse en la piel de héroes supervivientes de un apocalipsis zombi junto a un amiguito. Saltaban de un lugar a otro con asombrosa agilidad enarbolando palo o armas de juguetes y amenazando al enemigo con abrirle la cabeza antes de que puedan comerse sus cerebros.
Yo los veía jugar y me imaginaba a las hordas descerebradas cargando contra ellos con muy poco éxito. Nadie puede con estos tres valiente que se lanzan contra el peligro sin miedo y vociferando gritos de guerra escalofriantes.
No me extrañaría nada que los propios no muertos recularan alucinados y acabaran huyendo con el rabo entre las piernas al verse frente a estos salvajes. Y seguro que así era en su imaginación hasta que... Se cansaron del juego.
Entonces decidieron que los de Covarrubias se las apañaran como pudiesen contra la terrible amenaza porque ellos se iban a jugar a otra cosa mariposa. Una suerte para los zombis que quedaran en pie.
Pues oye, haber salvado un pueblo entero de una invasión zombi queda muy bien en el currículum. Jajajaja. Besotes!!!
ResponderEliminarYa ves. A estos les contratan como exterminadores de zombis seguro. ya les veo en la segunda parte de Guerra Civil Z o algo así jajaja
Eliminarjejejeje pues... los zombies quedároslos! jajajajaja que no se espandan por la provincia, sino.... tus chicos tendrán la culpa jajajajajaja
ResponderEliminarYa os contaré si veo alguno por mi pueblo (seguro :D )
Yo diría que cuando se cansaron ya no quedaba ninguno. Y si quedaron emigraron fuera de España para no volver a encontrarse con semejante fieras jajajaja
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