miércoles, 9 de junio de 2021
Mis niños me cocinan
Últimamente a mis peques les ha dado por querer cocinar, lo que a mí me viene genial porque no me gusta nada cocinar, pero, por otro lado, me pone la cocina para el arrastre. eso es malo porque tampoco me gusta limpiar, pero, porque ellos se lo pasen bien y aprendan, pago el precio.Aunque no lo pago siempre ni todos los días, porque no siempre les doy el gusto. Les he prometido que en vacaciones les daré más manga ancha, sobre todo porque pienso ponerles a limpiar también. Ya sin exámenes, tareas ni cole pueden pegarse hasta las tantas frotando la encimera muahahaha.Además, a Daniel se le ha ocurrido una idea muy divertida. Todos tenemos que idear una plato con los mismo ingredientes y papá decide cuál le gusta más. Creo que lo ha sacado de Masterchef. Me parece divertido, aunque me da un poco de miedo cómo va a quedar la cocina después de algo así.Estos días me han librado de hacer la cena un tres de veces por el entusiasmo infantil por ponerse el delantal. Una vez porque Daniel se empeñó en hacer él la pasta a la carbonara, otra porque Iván quiso emular a su hermano e hizo una receta bien sencilla y resultona que me pasaron por twitter (gofres de calabacín) y otra porque a los dos les dio por experimentar y menuda sorpresa me dieron: Daniel hizo pollo rebozado al toque cítrico acompañado de menestra especiada de apio y zanahoria e Iván preparó el delicioso postre masa de gofre de plátano y pera con cobertura a elegir. El padre y yo elegimos sirope de arce y los niños de chocolate y azúcar glas. Menudo festín nos pegamos.Y lo mejor es que el último día estuvieron supervisados por el padre porque tengo que admitir que yo sufro muchísimo viéndolos trastear con cuchillos y fuegos. Para mí siempre van a ser los bebés de mis inicios maternales.Asumo que si no practican, se equivocan, incluso se queman o se hacen algo de daño, no aprenderán nunca, pero me cuesta un poco dejarles volar. Aún así, les dejo tomar el control de la cocina, normalmente conmigo a su lado para minimizar riesgos. Y cada vez se les ve más sueltos.Así que, en cuanto cojan vacaciones, que me hagan la lista de la compra y me sustituyan de una vez por todas en la cocina jejejeje
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A los míos los tengo muy mal acostumbrados, no tienen ni pinta de ganas de entrar en la cocina...yo de pequeña también hacía como tus peques ;-)
ResponderEliminarPues yo hacía como los tuyos. Me encantaba comer, pero no cocinar jaaajajaja
EliminarQué suerte tienes. Un beso
ResponderEliminarA ver lo que les dura el entusiasmo ;)
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