Crear conciencia social desde bebés

Ayer, cuando fui a dejar al más pequeño de la familia en su escuela, me encontré con que tenían muy presente que el 2 de abril es el día del autismo. Habían llenado el techo de globos y las paredes de carteles. Los profesores lucían camisetas azules y una gran sonrisa. Me encantó que tuvieran tan en cuenta la integración de los niños que sufren de autismo, o quizá seamos nosotros los que sufrimos de realidad y demasiada socialización.

Cuando volvía por Iván, habían montado en la entrada una piscinita de globos azules, en la que había estado jugando mi niño, entre muchos otros chiquillos.

Me parece fenomenal que construyan la conciencia social de los peques desde que son bebés y a base de juegos, que es la mejor manera de que aprendan.

En el cole del mayor no vi tal despliegue, pero estoy segura de que dedicaron, al menos, una actividad a este respecto.

Ya en casa, le conté a mi marido mientras cenábamos la puesta en escena de la guardería y el mayor estuvo preguntando sobre los globos muy interesado. Así que aproveché para contarle que existen unos días especiales para recordarnos los problemas sociales, de salud, de educación, etc... que no debemos olvidar y por los que tenemos que trabajar en pro de su resolución. Evidentemente, estas no fueron mis palabras. Porque no hubiera entendido ni jota.

Si concienciamos a los niños de que pueden cambiar lo que no les gusta de su entorno y mejorar el mundo con sus acciones, el día de mañana contarán con las herramientas para intentarlo y poner su granito de arena.