sábado, 23 de febrero de 2013

De mal en peor... Menos mal que están los amigos y la familia

Después de caer malo Daniel, caí yo, pero seguí llevando un ritmo de locos. Y si a eso le sumamos que mi hijo mayor nos dio a todos una noche terrorífica el resultado fue que empeoré con 39 de fiebre, escalofríos, tos, dolores por todo el cuerpo... Como no podía ir al médico seguí las indicaciones que me dio el lunes la pediatra cuando llevé a Daniel, pero traducido a necesidades adultas: Paracetamol y Flutox.

Raúl llevó y recogió a Iván de la guardería el martes, pero al día siguiente sólo pudo llevarle por la mañana porque cogía un avión rumbo a Bruselas y no volvería hasta el viernes. Gracias a diós, el miércoles movilicé a mi suegra y amigas para poder recuperarme un poco. Yoli recogió al bebé de la guardería, Mari Carmen vino a ayudarme a cuidar de los niños por la tarde y Chari, mi suegra, se llevó al bebé en cuanto pudo escaparse de su trabajo para que pasara la noche con ella y llevarlo de nuevo a la guardería al día siguiente.

Esos días los pasaba intentando recuperarme lo antes posible, sin descuidar demasiado la casa para que no se me cayera todo encima y lidiando con el peor enfermo del mundo: Daniel. Sólo sabía decir que no. ¡Hasta se negaba a beber agua o hacer pis! Un día estuvo más de ocho horas sin ir al baño por cabezonería. Tampoco quería comer, ni tomarse la medicina, ni el agua con limón, ni que le untara Vips Vaporub en la planta de los pies, ni que le pusiera la mitad de cebolla en la mesita de noche para que tosiera menos... A todo era que no y lloros y más lloros.

Lo cierto es que nunca ha visto tanto la tele como estos días, aunque yo intentaba distraerlo con plastilina, juegos de ordenador (está loco con uno de construir robots), los legos, cuentos, el tren del Ikea, los lápices de colores (me tiré un buen rato dibujando virus y robots a su gusto)... Pero nada le entretenía más de media hora.

El jueves por la tarde ya no me quedo más remedio que ocuparme yo solita de mis dos fieras, pero ya estaba mucho mejor (Gracias a todos lo que me ayudaron cuando les necesité). Daniel hizo cura de sueño y se levantó a las siete con lo que me dejó via libra para ocuparme toda la tarde exclusivamente de la fierecilla menor. Se levantó al grito de "¡Quiero la merienda!" y con mucha mejor cara. Supuse que no habría quien le metiera en la cama esa noche, pero me equivoqué. A las diez ya estaba bien arropadito y con un sueño que se caía. Mi dos churumbeles se portaron de lujo y durmieron del tirón, pero yo no podía pegar ojo porque cada vez me encontraba peor.

A la mañana siguiente estaba fatal. Hice tripas corazón y me fui a llevar a Iván a la guardería mientras Mari Carmen se quedaba vigilando al dormilón. Cuando volví estaban jugando con una libreta y un boli tan a gusto.

Pasé un día horroroso. Y la tarde aún fue peor. Daniel se negó a dormir la siesta con lo que no pude echarme ni un ratito. Estuve cuidando de dos niños perfectamente activos y traviesos. Pen sé que en algún momento me caería redonda al suelo.

Cuando los metí en la cama fue la mejor hora de la jornada. Me desmayé en mi lecho esperando la llegada de mi marido, que por fin volvía de su viaje de trabajo. Nunca había anhelado tanto su vuelta.

El sábado, Raúl se llevó a los niños a casa de la abuela y, por fin, pude convalecer a gusto unas de horas. Era justo lo que necesitaba. A ver si logro quitarme de encima este resfriado, gripe o lo que sea...

11 comentarios:

  1. Ay que penita me ha dado leerte!!! Cuando se está enferma no hay ganas para nada y encima tus peque son super activos, me imagino lo que te debió costar. Mucho ánimo y que te recuperes pronto.

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    1. Ya estoy mucho mejor mil gracias. Menos mal que tuve amigas alrededor y todo salió muy bien :D

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  2. Recupérate pronto! Aishhhh debe ser durillo estar malita, cuidar de otro malito y del bebé!

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  3. Ayyyy. Poneos buenos todos, que estar malito es una lata... (¿Vicks vaporub en los pies? En mi vida lo había oído...). Besotes!!!

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    1. Es un método para que los bebé sy niños pequeños dejen de toser (Ya te veo aplicándote el potingue en los pinrreles jeje)

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  4. ¡Vaya,pobrecilla! ¡Y pobrecillo Daniel!
    Me alegra que ya estés mejor,y que tengas ayuda.

    Un besote de otra canaria.
    Mar

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    1. Muchas gracias!!! La verdad es que me encuentro mucho mejor. ¡Menos mal!

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    2. Muchas gracias. La verdad es que me encuentro infinitamente mejor ¡Menos mal!

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  5. Madre mía que difícil es estar enferma con dos fieras... menos mal que ya pasó...

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    1. Sí :S

      Casi muero con esta experiencia. Menos mal que tuve manos amigas a mi alrededor.

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