De repente, miro a Iván y suenan todas las alarmas dentro de mi cabeza. Ya tiene puesto ese gesto que tan bien conozco y con el que empieza todo.
"¿Cariño, te pasa algo? ¿Estás bien?"
"¡No!" - Uuuuuy, mal vamos.
"¿Pero que ha pasado? Si no ha pasado nada.- aseguro yo agarrándome a un clavo ardiendo. Aquí la conversación puede dar dos giros y ninguno bueno. O me suelta un "Eres tonta" que se repetirá hasta el infinito, a veces acompañado de metódicos golpecitos en donde pille de mi lozano cuerpo, o asegura compungido que le he pegado. ¡Menudo mentiroso! Y también lo repetirá hasta la saciedad. Y da igual lo que digas o hagas, ya sabemos como va a acabar esto si no damos con la tecla correcta para que cambie el discurso.
Mis neuronas se ponen a trabajar a toda velocidad y con un poco de suerte daré con el argumento adecuado para que olvide sus ganas de liarla: "Que va hijo. No te he pegado, lo que pasa es que lo soñaste anoche. Ya decía yo que te oía gruñir en sueños y no sabía por qué...", "Ay, Iván, que ya sé lo que pasa. Has sido expuesto a los rayos gamma como Hulk y... ¡Te estás convirtiendo! Cuidado coches que Ivan Hulk os va a lanzar a todos por los aires"... Si se ríe estás salvada. Si no... ¡Malo!
Tenemos dos modalidades: gritos, lloros y que le golpee desesperadamente o destrucción sistemática y concienzuda de todo lo que le rodea: Juguetes, cables, posters, libros... Luego se arrepiente, pero a veces ya no hay arreglo.
Ignorarle no es opción porque te destroza la casa y darle bolilla es justo lo que quiere, así que la cosa se pone muy difícil. ¿Que hago? Pues según el día, como me encuentre yo y la dirección que tome la perreta. Muchas veces le agarro fuerte sin decirle nada, pero puede estar horas berreando y pegándome. Otras le hablo suave y dulcemente a ver si así se calma. Otras le aseguro firmemente que me ha hecho enfadar y que así no va a conseguir nada, y muchas acabo gritando yo también. Una tiene sus límites.
Todos los días nos comemos al menos una y suelen ser dos o tres. Así que su padre y yo estamos hasta las narices y con muchas ganas de que acabe esta fase.
jo, lo has clavado, así llevo yo una rachilla con mi peque, que es de la edad de Iván. Está más pegón, en general, escupe (no a las personas, pero tampoco me gusta que escupa a una pared, o en el banco de la piscina, como hizo el otro día), se pone en plan destroyer en cuanto me descuido, juega a empujarse con los amigos, con lo que al final uno acaba llorando. Y no puedo considerarlo rabietas, porque no lo hace cuando está enrabietado (afortunadamente las rabietas no son muy malas, casi siempre acaba razonando cuando te sientas a hablar con él). Si das con la fórmula mágica me la cuentas, y si doy yo con una, que no sea el internado en Suiza, te la cuento yo a tí.
ResponderEliminarNuestros peques son almas gemelas Sight!
EliminarEl mayor dice que la clase de Iván es muy pegona, su hermano incluido!! Pero eso son juegos, aunque acaben llorando. Lo de las perretas es otra cosa aaarg!!
Y lo de escupir también lo he pasado, aunque ya parece que se le ha pasado. Parece que lo hacen a posta para enfadarnos.
Hoy le decía al peque: "Tú que pasa ¿Que te pasas las noches planeando maldades para volverme loca la día siguiente?" Y se reía el tío grrrr
Mucho ánimo!! A ver si damsos con esa fórmula mágica roto, aunque yo creo que tiene que ver con la paciencia y esperar a que se hagan más mayores
Yo cuando veo algo así por la calle o en un centro comercial sufro mucho por los padres. No sé qué haría yo en semejante situación. Tiene que ser muy desesperante. Un besote y ánimo, a ver si se le pasa pronto.
ResponderEliminarJo, gracias
EliminarEs que tú nos entiendes...
Yo no he vivido eso aún, ¿es una de esas fases que pasan todos?. Mejor no me contestes que me podré hacer la ilusión de que eso a mi peque no le va a pasar. Mucho ánimo a los papis :*
ResponderEliminarJajajaja No tiene por qué pasar. No te preocupes. Y si pasa, a cada niño le da por una cosa. Daniel se tiraba al suelo y parecía que le daba un ataque de epilepsia, e Iván golpea todo lo que pilla.
EliminarMadre mía, santa paciencia la tuya!! No sé qué decirte porque estas situaciones no las he vivido y si las tuviera pués... según el día supongo, como tu. Así que paciencia que seguro pasará.
ResponderEliminarBesos!!
Muchas gracias guapísima. Nos armaremos de paciencia y esperaremos que se le pase pronto. Si tiene esas perretas, será que esta intranquilo, se siente inseguro o poco atendido (aunque no sea verdad). Son sus pequeñas rebeldías
EliminarJolín, vaya faena. Espero que se le pase pronto.
ResponderEliminarSe me ocurre que le grabes un video sin que te vea, cuando está así y cuando se le pase y puedas hablar con él enseñárselo a ver qué te dice si le gusta eso de él. Quizá al no gustarle cambie su actitud. No sé, es lo primero que se me ha ocurrido.
Paciencia y espero que pase pronto
Eso lo hice con Daniel y le gustó tanto que me lo hizo poner mil veces jajaja Nunca se sabe con estos. Pero lo intentaré con su hermano. A ver con qué me sale ;)
EliminarPues como bien dices ,es una fase, una etapa y a ver si se mejora pronto ,pero manteneros firmes los dos es inquebrantable ,que no piense que se sale con la suya. Es agotador y produce un desgaste físico y sicológico brutal pero no queda otra. La idea de grabar está muy bien,y de recordarle que en otro momento en que él esté bien y relajado tú vas a entrar en modo perreta y vas a hacerle lo mismo,entonces a ver que le parece . A ver si se relajan que esta última etapa están muy cansados.
ResponderEliminarEso intentamos, aunque a veces es muy difícil. Sabe perfectamente que en cuanto empiece a romper cosas le vamos a para como sea.
EliminarEn cuanto pueda le grabo y a ver si logramos algo. Ojalá!!
El método imitación de su perreta lo he intentado ya y no sirve. Me ignora y sigue con su actividad demoledora Sight!
Muchas gracias
Que transformaciones más angustiantes las de los peques!... cada vez los retos son más grandes para los padres. Nosotros estamos atravesando una etapa parecida, pero no es entre el peque y yo sino con el papá... vaya golpes que le propina!
ResponderEliminarQué decir, qué decirnos... paciencia, ojalá que todo pase pronto.
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EliminarAyss vaya tela te entiendonesn que uno tienene paciencia pero hasta cierto punto. Yo todavia no estoy en esa fase pero tiemblo de pensarlo, tomare nota por el momento de tua distintas formas de actur. Gracias.
ResponderEliminarÁnimo. A lo mejor tu peque no pasa por esto o e algo mucho más suave. Cada niño es un mundo.
EliminarGracias!!
Ivanhulk tiene que dar miedo. Mucho miedo y si se pone verde ya vamos... jajaja ay hija menos mal que piensas rápido y sales airosa !! besossss y animos!!!!
ResponderEliminarIvanhulk da mucho miedo, sí jajaja
EliminarA veces la neuronas no dan para más y la cosa estalla, pero bueno. Ya falta menos para pasar esta época de su vida :D
Como te entiendoooooo!! Nada que añadir, porque ando igual que tú.
ResponderEliminarMuas!
Buuuuf! Mucha suerte y paciencia porque estos chicos son expertos en hacernos estallar. Ánimooooo!!!
Eliminar:( suponemos q será una fase. ánimo y suerte!!!
ResponderEliminarEso pensamos nosotros también, pero le ha dado con tanta fuerza que no sabemos si sobreviviremos Sight!
EliminarMuchas gracias!!
Ser madre es muy difícil
ResponderEliminarY tanto!! Nunca sabes cual será el siguiente reto. Que miedito!!!
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