Vi en Instagram una foto que me llamó poderosamente la atención. Se trataba de seis vasos con agua, tres de ellos tenían colorantes primarios. De uno a otro iba una servilleta de cocina tocando el agua de los vasos vecinos, así habían viajado los colores a los tres vasos transparentes formando los secundarios. Era taaan bonito y taaan sencillo. ¿Qué podía fallar?
Pues mis ansias como siempre. ¿Para qué voy a leer como se hace o pararme a pensar? Encima mis hijos están ávidos de experimentos tras el taller de presentación de las Muñecas Project MC² en el Museo de Ciencias Naturales. Así que me tiré a la piscina y llamé a los peques para asombrarles con magia científica.
Pusimos seis vasos en disposición circular. Los llenamos de agua. Añadimos colorantes en tres alternos, metimos las servilletas como puente de un vaso a otro y nos sentamos a esperar. ¡Uau! Que emoción cuando empezamos a ver el recorrido de color en los papeles. Peeero, de repente se paró todo sin llegar a tocar el agua cristalina. "Seguro que es porque tarda más de lo que esperábamos. Lo dejaremos ahí toda la noche", aseguré yo muy optimista.
Los niños me siguieron el rollo entusiasmados. Sobre todo Daniel, que se levantó al día siguiente de un salto deseando ver resultados, pero estaba más o menos igual. Decidí que tenía que tomar cartas en el asunto. "Seguro que si metemos más papel conseguimos algo" Y metimos más papel, pero poco pasó.
Ahí fue cuando mis neuronas decidieron por fin funcionar y di con el fallo en la ecuación, digooo, en el experimento. Cogí unas cajitas y elevé los vasos coloreados por encima de los no coloreados. Fun fun fuuuuuuuun... en cuestión de segundos se obró el milagro y los vasos transparentes se llenaron de naranja, verde y morado. El mayor estaba entusiasmado. Llamé al pequeño para que viera el resultado y se mosqueó bastante cuando le contamos que habíamos estado haciendo cosas sin él.
"¡No pasa nada!" aseguré, "lo repetimos y ya está". Eso hicimos. Esta vez con los vasos en alto. Pusimos las servilletas y vimos como el agua subía por el papel hasta que... se paró antes de tocar las límpidas aguas. Nos miramos entre los tres y decidimos de mutuo acuerdo dejarlo estar. ¡A la porraaaaa!
Me encantaaaa!!!
ResponderEliminarEs muy llamativo :D
EliminarA mí me encantó las fotos que vi en Instagram. Todas mucho mejores que las mías jajaja
Me encantaaaa!!!
ResponderEliminarQué chuli !!
ResponderEliminarSí que mola y es muy fácil de hacer para que ellos lo hagan solitos. Que luego pase el color como dios manda ya es otra historia jajaja
EliminarA nosotros tambien se nos atraganto el experimento,por el blog tebemos una entrada.y mira q parecia facil...
ResponderEliminarLa buscaré. Yo pensé lo mismo jajaja
EliminarY parecía fácil...
Ahora me tengo que marchar ya, pero te explicaré esta noche(supongo que tenga tiempo) donde está el error con lujo de detalles pero ya te digo que no debiste de poner agua sin colorante en algunos vasos. Te dejé el enlace de cuando nosotros lo hicimos hace años.
ResponderEliminarChao que llego tarde ,muac
Síiiii. ya lo vi. Leí tu comentario y me fui directa al enlace. Y te lo comenté con lo mismo que me señalas jajaja
EliminarLo repetiré y esta vez bien ;)
Yo también lo vi, no fue en pensamiento divergente? me suena. es super bonito.
ResponderEliminarSíiiii. Me ha dicho pensamiento divergente que ella lo posteó y ahora ya sé lo que falló jajaja
EliminarMe lo explicó ella ;)