Malas compañías

El viernes llegué a recoger a Daniel a la guardería y una de la sprofes me soltó una bomba "Tu hijo se está portando mal, está mas rebelde y no obedece". "¡¡¿¿Cómo??!!"No es que sea un dechado de virtudes, pero hasta ahorame decían que era una niño maravilloso y educadito. Ni que decir que yo me hinchaba como un pavo.

De repente mi niño modelo se ha desviado del buen camino ¿Qué ha pasado? "Se ha juntado con otro niño con problemas de comportamiento" Uf, sé a quien se refieren. El peque es un encanto: cariñoso y simpático, pero tiene un hermano mayor que es un terror. No es mal chico, pero es que no tiene una idea buena. La madre es amiga mía. No es cuestión de decirle que su hijo está influenciando de forma negativa a mi hijo. Seguro que no le sienta bien.

Yo al peque le noto como siempre. A veces se porta bien, otras veces tira de la cuerda hasta que se rompe y su mamá estalla, otras veces hace travesuras sin importancia... pero en el fondo se le ve que es bueno. Aunque a lo mejor yo no soy la más indicada para verlo. Puede que el amor materno no me deje ver todos sus defectos, ¡pero muchos de ellos sí! Y le castigo y le riño cuando creo que es necesario. Casi las venticuatro horas del día debido a su corta edad. Está aprendiendo y creo que es justo el momento de poner los límites.

Por otro lado, el tema de la mala influencia no me preocupa demasiado porque es probable que cambie al niño a otro colegio para cursar infantil y ya no se verán tanto. Seguro que hay otro chiquitín malote al que imitar en el nuevo centro.