Covarrubias en Navidad

Este puente nos hemos dado un salto a Covarrubias. La idea era descansar, pero al final no hemos parado. Para empezar el pueblo estaba diferente, luminoso, con un ambiente especial... Es decir, de un navideño subido que daba gusto.

Los muñecos de nieve, los papa noeles y los búhos hechos con troncos me llamaron mucho la atención. La mía y la de los niños, que había que vigilar para que no se entusiasmaran demasiado con ellos. Son una decoración de lo más original.

Pero para original, el Belén de la Colegiata, que sorprendía al primer vistazo. Los vecinos del pueblo habían reunido enseres y muebles antiguos que habían mezclado con las preciosas figuras del Belén. El conjunto era una habitación de museo poblada por pastores, reyes magos, soldados, animales...

Podías quedarte horas admirando cada detalle.

También la feria de artesanía sorprendía de lo bonita que era. Cada puesto era una exposición de arte impresionante. Láminas, cuadros, alfarería, complementos, botas de vino artesanas... Todo precioso.

Los niños estaban tan inmersos en el ambiente navideño, que cuando llegó el domingo y les hicimos saber que tocaba volver a Madrid casi les da algo. Me temo que ya se pensaban que estaban de vacaciones.

El caso es que ha sido un puente de lo más interesante descubriendo nuevos Museos y redescubriendo antiguos lugares. Y viviendo la magia de la Navidad, claro.