El proyecto de Verkami de Un amigo diferente salió adelanta para gran alegría de los mecenas. Yo una de ellas, así que me fui muy contenta a la presentación de este completo libro lleno de valores en pro de la integración y en contra de los prejuicios.
Llegué muy tarde porque tuve la mala suerte que me coincidió con otra historia, pero me alegré de haber ido, aunque fuera cuando la presentación ya estaba terminando. Como me dijo el marido de la escritora del libro, Rafa, promotor de Jugando por ellos, "Vienes justo a tiempo. Acabamos de empezar con la merienda". Aunque a mí me hubiera gustado estar desde el principio y no perderme la actuación de Fernando Cascales, que se atrevió con un directo de su música, ni la intervención de María José Rodríguez Gómez, una grandísima persona, enamorada de los libros, defensora de los animales y madre maravillosa. Ni Tampoco la charla de Melisa Tuya, también escritora y amante de los animales. Es que la cosa prometía mucho...
Pero al menos llegué para recibir mi ejemplar firmado, con el audio libro, la bella historia y los preciosos dibujos. Mis hijos se lanzaron a por él. Sobre todo Daniel, que no estaba muy dispuesto a devolvérmelo. Como siempre se escudaba en que el de la dedicatoria era su nombre y el Iván, así que era de ellos. Una lógica aplastante.
Mis peques se lo pasaron genial con los otros niños y la pizarra, aunque el mayor en un momento dado se sentó a meditar en un rincón dejándome con la boca abierta. me acerqué a preguntarle el por qué de su extraño comportamiento y me contestó que se sentaba a meditar porque no encontraba a nadie de su tamaño para jugar. No dijo edad, no. ¡Dijo tamaño! Es un chiquillo muy alto para su edad, pero Melisa le mandó enseguida a su peque para que se midieran. Parece que se quedó satisfecho porque volvió a los juegos sin poner más pegas. También puede que algo tuviera que ver que Rafa sacara la tablet justo en ese momento y se la dejara.
El cuento es aún más hermoso impreso en papel. Nos tiene muy impresionados. Es una verdadera maravilla.
Que interesante! Me encanta este tipo de libros para fomentar valores.
ResponderEliminarVeo que los peques se lo pasaron genial en la pizarra.
Un abrazo!