Variar el plan playero por el jardín canario me había colado un día, pero al siguiente ya tenía a mis tres hombres clamando por sol, mar y arena. No me quedó más remedio que preparar la bolsa con las toallas y tirar para la playa a pesar de que el día amaneció nublado. Por suerte la temperatura acompañaba, unos 25 grados según el termómetro, y hasta nos bañamos muy a gusto.
El sol asomaba entre las nubes de vez en cuando para recordarnos que no se nos olvidara darnos la cremita porque aún con el cielo cubierto el seguía allí lanzando Rayos Uva a porrillo.
Hubo baile y batalla con las olas, fortalezas de arena y bestias pardas que destrozaban castillitos al más puro estilo Godzilla, un simpático hombrecito de arena, hoyos profundos con fierecillas agazapadas y sobre todo risas y más risas. Que bien sienta la playa en Navidad. Y eso que cuando vivía aquí la pisaba poco. Nunca se aprecia lo que se tiene hasta que se pierde.
Mientras nos divertíamos, Daniel se hinchaba y se hinchaba. Y yo sin darme cuenta de nada. Que desastre. Como el chiquillo no se quejaba y jugaba con su mejor sonrisa yo le veía bien, pero luego, al repasar las fotos veía su orejita colorada e inmensa, el ojito cada vez más hinchado y las picaduras malditas.
Hasta la tarde no reparé en lo evidente, pero eso lo cuento en otro post.
que intrigas, entre lo de los gatos del botánico, y la hinchazón de Daniel, a mí por lo menos me tienes en ascuas :D
ResponderEliminarQue suerte que hayáis pasado en la playa los últimos días de Navidad, a mí también me gustaría, lástima que toda la familia sea de Madrid
Es genial ir a Canarias en navidad, pero por otro lado, también es genial tener a la familia cerca... :D
EliminarQue envidia de fotos, lo que daría por una jornada así.
ResponderEliminarOye ¿qué le pasó al mayor? Espero que nada grave.
Besos
No fue grave, pero tuvimos que llevarle a urgencias porque le picaron las pulgas que tenía el gato y por lo visto es alérgico así que se nos hinchó un poquito. Él estaba como una rosa y al 100%, pero preferí llevarle al médico por si acaso...
EliminarToda la razón. Cuando yo vivía en Montevideo no te creas que iba mucho a la playa y hay que ver ahora lo que la echo de menos. Jajajaja.
ResponderEliminarEspero ansiosa tu próximo post!! Besotes.
Pues sí, el próximo es ya el de la visita a urgencias jajaja
EliminarEres adivina ;)
Y es verdad que cuando tenemos la playa cerca ni vamos y ahora en Madrid la echamos en falta, aunque a mí la rana me da repelusillo, no creas jajaja
con el frío y la lluvia que hoy tenemos por aquí.... que envidia con esas fotos....
ResponderEliminarBesines
Si te consuela de eso ya hace una semana ainsss
EliminarAhora estamos también cogeladitos ;)
q maravilla. Playa en enero ¡genial!
ResponderEliminarpero no encontrarás a ningún canario, que para ellos es invierno y hace frío jajaja
Eliminarjejejeje
EliminarLa playa en Navidad tiene que ser genial, te dará un respiro por el frio pasado en Madrid increible, la verdad es que solo salir y cambiar de aires vale, pero si encima es en la playa.....que le pasó al peque???
ResponderEliminarAaaay ya ni me acuerdo snif snif
EliminarPero sí que es verdad que es un paréntesis bestial y vuelves como nueva :D