Pero hace poco, Daniel entró en escena. Encontró el set de caretas y buscó al hermano cargado de tijeras y útiles para hacer el uso apropiado del mismo. Cuando me los encontré recortando el cuaderno hasta me dio pena y todo. Con lo bonito que era de libro. Pero entiendo que tenía que terminar ejerciendo su función.
Para completar su juego fui a por los rulitos que nos regalaron los mismos que el set de caretas y las usamos como elásticos. Eran ideales para cumplir esa función porque son muy suaves y no les molestaban ni les apretaban.
Así estuvieron jugando a ser hombre lobo, forzudo, hombre patata, domador de serpientes... Cuando acabaron guardamos las caretas para otra ocasión. Fue un juego muy divertido y lleno de imaginación.
Que divertido, y eso donde lo habéis comprado, me encanta para regalar a mi sobri...ya me contarás
ResponderEliminarSon de Tiger y a estos les están dando mucho juego :D
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